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miércoles, 20 de noviembre de 2024

La Luminosa de La Habana

En la noche sobresale la majestuosidad de la comúnmente llamada “Fuente Luminosa”...

Abel Rojas Barallobre en Exclusivo 25/06/2017
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Escenas de la Fuente Luminosa
La Fuente Luminosa es una obra situada en uno de los sitios de más afluencia y tránsito de vehículos de La Habana. (Abel Rojas Barallobre / Cubahora)

Un gran por ciento de los habitantes de La Habana la aprecian habitualmente; algunos hasta más de dos veces durante el transcurso del mismo día, cuando por necesidad deben transitar por la rotonda que forma la intercepción de la Avenida de Rancho Boyeros con la Avenida 26 y Vía Blanca, frente a la Ciudad Deportiva. Pero es en la noche cuando sobresale la majestuosidad de la comúnmente llamada “Fuente Luminosa”; cuando hace gala con la luminaria instalada a su alrededor y las luces se fusionan con los chorros de agua que brotan del propio monumento, construido con piedra de cantería.

Esta obra, con 72 años de edad, también tiene su historia: su construcción se le atribuye al arquitecto e ingeniero José San Martín (conocido como Pepe Plazoletas y primo del presidente Grau San Martín), quien en aquel entonces ejerció de secretario de Obras Públicas. Ramón Grau San Martín, quien gestó como mandatario de Cuba durante el período de 1944 a 1948 era soltero, y la labor de Primera Dama de la República la llevó a cabo la viuda de su hermano la Señora Paulina Alsina; de ahí que en el momento de su creación la céntrica fuente adoptó un nombre que la ironía y el humor criollo bautizó como “El Bidet de Paulina”.

Fuente Luminosa

Estructuralmente la obra está formada por un núcleo central dentro de tres platos o tazones, que van de mayor a menor en la medida que ascienden, finalizando la columna central en forma circular a más de un metro de altura. De la parte superior y del plato más grande salen chorros de agua que se vierten en la cisterna para comenzar de nuevo su circulación.


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Abel Rojas Barallobre

Se han publicado 1 comentarios


Observatore Habanero
 25/6/17 23:22

Qué titánico esfuerzo para envolver en celofán y presentarnos como majestuosidad  ese adefesio urbano, que hace mucho tiempo ni refresca ni ilumina. Una pieza dislocada que ya no es centro de una rotonda de tránsito enloquecido en horas pico, con varios surtidores rotos o tupidos y los otros lanzando agua ¿limpia? hacia vehículos y transeúntes con la menor de las brisas.

Ella, la añeja fuente, está pidiendo a gritos que la restauren o que la jubilen. Nosotros, los miles de habaneros que pasamos por ahí todos los días, los que resbalamos con las motocicletas o somos salpicados con aquella agua "luminosa",  nos preguntamos cuándo será relevada y cuándo otras obras de la arquitectura y de la vialidad moderna vendrán a hacerle gala verdadera a la avenida que conecta con el principal aeropuerto del paìs.

Gracias por las fotos, mejores que la fuente.

 

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