Autoridades electorales cubanas realizan hoy una prueba dinámica del referendo previsto para el domingo venidero, en el cual más de ocho millones de electores se pronunciarán sobre la nueva Constitución aprobada por la Asamblea Nacional del Poder Popular.
Como en otras ocasiones, el ensayo está concebido para verificar, comprobar y poner a punto todo lo relacionado con las votaciones.
La prueba se realizará en dos momentos, el primero de ellos dedicado a probar todos los medios, recursos, aseguramientos, el personal, los medios de comunicación y los de computación que serán desplegados el 24 de febrero.
Luego se hará un cierre y se dará paso de inmediato a un ejercicio que incluirá a las estructuras electorales de todos los niveles, desde las mesas hasta la nación.
En ese momento se trabajará con situaciones y partes simulados a modo de ensayo del procesamiento, la realización del escrutinio, la tramitación de los resultados desde los colegios hasta las circunscripciones y de ahí a las instancias superiores.
A partir de la prueba, se contará con una semana para evaluar todos los problemas detectados en ambos momentos del ensayo y resolverlos.
La nueva carta magna es fruto del aporte de la población cubana que entre el 13 de agosto y el 15 de noviembre últimos participó en más de 133 mil reuniones en centros de trabajo, estudio y comunidades para opinar sobre el documento.
Esa consulta, la cual también se extendió a los cubanos residentes en el exterior, arrojó alrededor de 780 mil sugerencias, convertidas después de su análisis y procesamiento en nueve mil 600 propuestas tipo, la mitad de las cuales fue incorporada al texto constitucional.
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