La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, inició una visita oficial a Cuba centrada en temas económicos bilaterales como la modernización del puerto habanero de Mariel y la perspectiva de que su país concrete nuevos proyectos en la isla.
Rousseff fue recibida por el canciller cubano Bruno Rodríguez a su llegada a La Habana en la tarde de este lunes en el aeropuerto internacional "José Martí".
Este martes, la presidenta brasileña homenajeará al héroe nacional José Martí previo al recibimiento oficial que le hará Raúl Castro, en el Palacio de la Revolución y la posterior reunión que tienen prevista para repasar la relación bilateral. Algunos medios aseguran que tal vez Rousseff se encuentre con el líder de la Revolución cubana Fidel Castro.
La visita tiene el objetivo de "profundizar la cooperación bilateral en las áreas técnica, científica y tecnológica, sobre todo en las áreas de agricultura, seguridad alimentaria, salud y producción de medicamentos", según informó un comunicado oficial de la presidencia brasileña.
El programa de la visita de Rousseff incluye también el martes un recorrido por las obras de la ampliación y modernización del puerto de Mariel (situado 45 kilómetros al oeste de La Habana), considerada la más importante inversión que se ejecuta en Cuba con la colaboración de Brasil.
Ese proyecto, en el que participa la poderosa empresa brasileña Odebrecht, cuenta con un presupuesto de 686 millones de dólares y el 80 por ciento de la financiación del coloso suramericano.
Es previsible que la participación brasileña en la industria azucarera cubana sea otro de los temas de la visita, después de que el grupo Odebrecht anunciara este lunes la firma de un contrato con Cuba para la gestión productiva de una fábrica en la provincia central de Cienfuegos.
La Compañía de Obras en Infraestructura (COI), subsidiaria de Odebrecht, rubricará el acuerdo que tendrá validez de 10 años, con el grupo empresarial estatal Azcuba, encargado del control de la producción de caña y sus derivados en Cuba, según fuentes de la entidad brasileña.
A primera hora del miércoles, Dilma Rousseff se despedirá de Cuba y viajará al vecino país de Haití, donde tiene prevista una visita oficial.
Los intercambios comerciales entre Brasil y Cuba alcanzaron los 642 millones de dólares en 2011, un 31 por ciento más que en el año anterior.
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