Fidel, un país en las imágenes de Valiente

Casi un centenar de instantáneas fueron seleccionadas para conformar el libro Fidel es un país, del experimentado fotorreportero Jorge Valiente y la periodista y crítica Sahily Tabares. El volumen, recién publicado por la Casa Editorial Verde Olivo, es un homenaje de sus autores a la vida del líder de la revolución triunfante en 1959.

“El relato que cuenta nutre el imaginario épico de la fotografía documental e incita a reflexionar sobre la trascendencia de un hombre excepcional, del estadista, del revolucionario de alma profunda y acciones trascendentes  para Cuba y el mundo”, dijo Sahily Tabares a Cubahora.

La periodista, a través de nueve secciones acompañó las imágenes de Jorge Valiente con textos que significan los entornos y situaciones en las que fueron capturadas. Así, lograron una narrativa que integra las dimensiones histórica, política, patriótica, educativa, cultural y social del trabajo de Fidel Castro.

Por su parte Valiente, fundador del diario Granma, recuerda la primera vez que retrató al Comandante: “Fue en el Aula Magna de la Universidad de La Habana en el año 1963. Nunca olvido ese momento en el que tuve delante a una historia viva de nuestra Revolución”.

Él se siente privilegiado “de haber sido su contemporáneo, y ahora de compartir las imágenes que me permitió captar la cámara fotográfica, esta es una de las mayores satisfacciones personales y profesionales de mi vida”.

“La historia que cuenta el libro ha seguido los pasos de un sujeto fotográfico peculiar, que se muestra junto al obrero, al científico, a los niños, las mujeres, en el podio, en la inauguración de centros científicos  e instituciones culturales”, considera Valiente.

El historiador y ensayista Pedro Pablo Rodríguez, quien prologara el cuaderno, y lo presentara el 2 de diciembre último en el Sábado del Libro, señala la importancia de publicar cuadernos de fotografía como este. “Es una línea de trabajo no desarrollada por las editoriales cubanas, a pesar de la riqueza de los archivos documentales existentes en el país”.

“La imagen es imprescindible para dar la riqueza de los sentimientos de Fidel. Tenemos una pléyade de héroes de personalidad hermosísima, que debemos conocer más”, añade.

Los textos –aclara Sahily Tabares– no son un complemento de las imágenes, no lo necesitan, pues cada una “es un texto elocuente que habla de la manera en que Fidel entregó su corazón. Él vuelve una y otra vez, lidera en las fotos las cuales enuncian, testimonian, validan que el líder está allí”.

Como el poeta argentino Juan Gelman, cuya obra inspirara el título del libro, los autores prefieren recordar a Fidel Castro “en el rincón del día/en que miró su tierra y dijo soy la tierra /en que miró su pueblo y dijo soy el pueblo (…)”.