Una pasión sobre ruedas

A propósito del Campeonato Nacional Selectivo de Patinaje en Cienfuegos, Cubahora conversó con Tony García Acuña, capitán del equipo nacional y uno de los atletas cubanos con mejores resultados en esta disciplina...

¿Fue siempre el patinaje la primera opción?

-Yo llegué al patinaje con cinco años y casi de casualidad, porque mi papá quería que fuera pelotero; hasta que un día, una vecina me llevó a la ciudad deportiva donde enseñaban a niños bien pequeños a patinar y desde entonces aquella actividad se convirtió para mí en una cotidianidad, luego en un entrenamiento constante, y ahora es mi pasión. He practicado, como aficionado, varios deportes, pero sobre patines me siento realizado.

Durante el año pasado en los Juegos Centroamericanos de Veracruz obtuvo la medalla de plata, sin embargo, por pronósticos debía llegar en quinto lugar a la meta, ¿qué significó ese resultado en su carrera?

-Para muchos deportes una medalla centroamericana es algo más, pero para el patinaje es una medalla muy difícil, porque participan atletas como los colombianos, mexicanos y dominicanos que tienen mucho talento, y un nivel competitivo muy alto. Solo cuatro cubanos participamos y tuve que prepararme bien, sobre todo mentalmente, ya que era imposible superar a los corredores que daban como favoritos. Pero me creí que podía subir al podio y durante la carrera de fondo fui fiel a la táctica que mi entrenador y yo habíamos pensado y salió perfecto.

Sus entrenadores, compañeros y aquellos que conocen elementalmente de patinaje de carrera cubano, no solo lo ven como un líder, también lo valoran como uno de los mejores en la corta, pero fructífera historia del deporte en la Isla, ¿cómo lleva ese apelativo?

-No alimento para nada esa categoría, pero sí soy un deportista consagrado, muy disciplinado en mi entrenamiento, que me esfuerzo, porque en ocasiones creo que me faltan las condiciones físicas ideales para tener resultados notables. No soy un atleta rápido, por tanto, modalidades de velocidad como los 300 metros contra reloj me son un poco complicadas, y las practico hasta el cansancio. Sí trato de predicar con el ejemplo, cuando mis compañeros del equipo me ven entrenando nadie sale de la pista, y eso sí me agrada, que tomen a la perseverancia como su mayor arma.

¿Qué opinión le merece el Campeonato Nacional Selectivo y qué cree del futuro de esta disciplina en Cuba?

-El campeonato nacional cada vez se hace más sólido y fuerte en cuanto a la calidad con la que llegan los patinadores. En lo particular para mí es el evento más importante del año, cualquier competencia internacional no sobrepasa las expectativas que yo tengo para con esta, precisamente porque me siento cómodo compitiendo con otros cubanos y constituye el escenario donde las personas importantes de mi vida, mis padres y sobrinos, me pueden ver.

Respecto a la evolución de este deporte en Cuba, es evidente el desarrollo que han alcanzado provincias como Camagüey, Granma y Santiago de Cuba, porque son corredores que en las pistas lucen como excelentes patinadores y tienen dominio de la técnica y su aplicación. Se siguen esforzando mucho los cienfuegueros, y para mí este es un entorno muy querido, estuve en la inauguración de esta plataforma y desde entonces, competir aquí ha sido una de mis principales atracciones.

De forma general, creo que el patinaje ha ganado mucho valor deportivo, en el ámbito popular ya no solo se aprecia como puro acto de recreación y entretenimiento, sino que se conoce como un deporte tan serio y necesario como cualquier otro. Pero sin dudas, es una disciplina muy costosa, que requiere muchos recursos y en ser entregado a ella, descansa todo el éxito de un corredor.

Labores y proyectos colaterales de un patinador

*Hace nueve años coordino un evento de patinaje infantil denominado “Roberto Chocolate Herrera in Memorian”, dedicado a quien fuera una de las personas más importantes de mi vida, porque me enseñó todo sobre este arte sobre ruedas. Es un evento para niños de ambos sexos, menores de 12 años, que compiten en tres categorías. Tiene mucho valor para mí, porque si sacamos una estadística de los jóvenes que participan hoy en el Campeonato Nacional Selectivo, casi el 70 por ciento asistieron a alguna de las ediciones de este evento. El año pasado participaron 120 niños y fue una experiencia muy gratificante para entrenadores, padres y ellos mismos.

También en La Habana tenemos un proyecto de Patinadores Voluntarios por el VIH, donde hacemos trabajo educativo en centros escolares y deportivos, repartimos condones a grupos de adolescentes y jóvenes, y al menos una vez por mes realizamos estas actividades en coordinación con el Centro de Prevención de las ITS-VIH SIDA.

¿A los 31 años Tony García ha pensado en un retiro de su carrera deportiva?

-Ya son más de 25 años patinando y antes de los centroamericanos lo pensé, sin embargo, este ha sido un año de resultados positivos, de muchas oportunidades y con una motivación de trabajo como nunca antes, al punto que ese tema por ahora está aplazado, porque considero que me siento en forma, no estoy cansado y lo sigo disfrutando tanto como cuando tenía solo cinco años.