Notas sueltas del Memorial Barrientos 2016

Entre los días 26 y 29 de mayo el Estadio Panamericano de La Habana acogió el Memorial Barrientos; la competencia de atletismo más longeva del Caribe. En su edición número 70, esta lid que honra al atleta universitario José Barrientos, contó con la participación de más de 300 competidores foráneos en representación de 15 países entre los que destacó Estados Unidos, presente con una amplia delegación de jóvenes talentos de este deporte así como República Dominicana, que llegó con varias de sus figuras más prominentes.

El certamen, único de carácter internacional que se organiza en nuestra isla, transcurrió marcado por la ausencia de varias de las principales estrellas del campo y pista contemporáneo cubano. La coincidencia —en fecha— con compromisos internacionales así como las lesiones privaron a los asistentes de presenciar el accionar de atletas como Yarisley Silva, Denia Caballero, Yorgelis Rodríguez y Pedro Pablo Pichardo, este último en franco proceso de recuperación. Ello incidió directamente en la calidad cuantitativa de los resultados en algunas de las pruebas disputadas. Sin embargo, luego de cuatro días de intensa lucha, siempre hay historias para contar, en las que, por cierto, destacan los menores.

- Los 67.02m logrados por Yaimé Pérez durante la clasificación del lanzamiento de disco para damas. Era una marca que pretendía mejorar en la final, pero su esfuerzo quedó por debajo, en 65.97m. Aun así, sus incursiones ratifican el nivel actual de la especialidad en Cuba, donde comparte roles con la actual campeona mundial Denia Caballero. A sus 25 años (los cumplió este domingo) a Yaimé solo le resta estabilizar similar rendimiento en la arena internacional.

- El disparo de 68.98 metros de Ayamey Medina (18 años), plateada en el lanzamiento del martillo. La discípula de Yunaika Crawford se convirtió así en la nueva recordista nacional juvenil de la especialidad, dejando atrás los 68.74 conseguidos por ArasayThondike en 2005. El tiro le vale para posicionarse en la cima del ranking de la temporada para menores de 20 años, un aval importante de cara al cercano Campeonato Mundial Juvenil (sub 20).

- Roberto Skyers (10.11 en semifinales y 10.15 en la final) se impuso con solvencia en el hectómetro, mejorando sus cronos de la temporada y ratificando que es el mejor velocista de Cuba en estos momentos. Su registro de semifinales le vale la clasificación olímpica para los 100m, aunque el camagüeyano sostuvo que su prioridad serán los 200m, una distancia en la que sueña dejar atrás la barrera de los 20 segundos.

- Los 8.28 metros que coronaron a Maykel Massó en el salto de longitud. Con 17 años recién cumplidos (nació el 8 de mayo de 1999) se convierte en el mejor de todos los tiempos en el listado histórico para menores de 18 años. El estirón es su nueva marca personal, deja atrás los 8.12m válidos que le figuraban en su ficha. Massó se incluye en la lista de clasificados a Río de Janeiro y afirma su candidatura de cara al Mundial juvenil. Recordemos que el pasado año se tituló entre todos los cadetes del orbe que dirimieron en Cali. El muchacho tiene estirpe, esperemos que siga sumando números positivos a su progresión; divisa necesaria para cumplir su deseo confeso de ser mejor que Iván Pedroso.

- En el triple salto, deprimido en esta edición, cabe resaltar la victoria de Davisleidis Velazco con 14.08m. Tiene 16 años y mejoró en 41cm su rendimiento. Su candidatura al mundial de Bydgoszcz, donde se solicitan 13 metros para asistir, es clara. Máxime, cuando este 2016 tiene la primera, la tercera y la quinta marca del planeta entre todas las atletas menores de 20 años que registra la IAAF en su ranking.

- Los 110m con vallas, una prueba que se prometía como la mayor atracción de torneo y terminó, prácticamente, en nada. Se esperaban con ansias los 110mV, en ellos debutaría Dayron Robles y se disputarían, incluso, los lugares en la selección cubana de cara a los cercanos Juegos Olímpicos sin embargo, la ausencia de Robles, aquejado de molestias en los gemelos y la salida en falso de Yordan O´Farrill dejó en tres concursantes la disputa. Finalmente fue Johanis Portilla el ganador, con 13.51 segundos, dos milésimas menos que el bisoño Roger Valentin Iribarne.

- En los 800m femeninos ya suman tres las clasificadas a Río 2016. Toda vez que la excuatrocentista Lisneidy Inés Veitía se incluyó en la lista con su registro plateado de 2:00.60 minutos. En los hombres, Andy González lo sigue intentando con todo, pero el 1:46.00 le es esquivo. Esta vez, con liebre incluida, quedó muy cerca, con 1:46.04. Quizás habrá que dejarle alguna oportunidad extrafronteras al muchacho.

En general, el Memorial Barrientos dejó sensaciones encontradas. Hubo luces, también sombras. Es evidente que se trabaja, y que el número de jóvenes talentos ha crecido, pero se sostiene esa impresión de que los resultados se ralentizan demasiado, en ocasiones hasta se estancan, conforme esos chicos y chicas van creciendo. El dilema de los saltos de categoría, el eterno enigma en torno a la fórmula correcta para convertir esas promesas en realidad. También habrá que revisar rendimientos y no precisamente por sus buenos augurios, como por ejemplo los resultados de Guillermo Martínez (plata con 76.02, 77.70 en clasificación) o Liadagmis Povea (solo 13.95m) que ha ido de más a menos con el desarrollo del año, por solo tomar dos ejemplos.

Lo cierto es que al correrse las cortinas de esta justa, se han catapultado los retos para el atletismo cubano y para esta competición, avocada a recuperar protagonismo y nivel. Intensión que reafirmó el señor Víctor López, director de la IAAF para América, durante su visita a nuestro país. Esperemos que los propósitos se materialicen y fructifique cada idea. A fin de cuentas, cada paso positivo que se concrete se traducirá en mejores condiciones para la práctica y desarrollo de un deporte acostumbrado a ocupar posiciones de vanguardia cuando a resultados de talla internacional se refiere.

En lo que al llamado deporte rey respecta, Río está a la vuelta de la esquina. El atletismo cubano en los Juegos Olímpicos se fue sin títulos en 2012. Senda dorada que también había perdido un año antes en los mundiales de Daegu. Denia Caballero y Yarisley Silva retomaron el curso el año anterior, en la cita mundial que organizó Beijing. Ella ha de portar el estandarte, pero el planeta no yace inerte y a diario surgen exponentes. El nivel aumenta y la rivalidad crece. Río está a la vuelta de la esquina. Resta esperar.