Gretell Barreiro se “teje” a sí misma (+Fotos) (+Video)

De casta le viene al galgo, dice el refrán y bien pudiera tomarse en cuenta al hablar de Gretell Barreiro Fariñas, quien seguramente heredó de sus abuelos, Manuel Duchesne-Cuzán y Carlos Fariñas, el talento musical.

Sin embargo, sus ansias de descubrirse, de “moverse” por los distintos géneros de la música y experimentar, combinando sus ideas y necesidades con las influencias que ha tenido, demuestran que no es de las que se acomodan tras los apellidos ilustres y decide, por tanto, trazarse su propio camino.

Gretell inició estudios de piano en el conservatorio Manuel Saumell y los continuó en el Amadeo Roldán, donde se graduó en 2004 de esa especialidad como profesora, músico de cámara, pianista-instrumentista solista y pianista acompañante.

“Mi familia, por supuesto, fue clave para que estudiara música. Desde los siete años me preparé para ingresar al Conservatorio. Aunque había pensado en la flauta, elegí piano y hoy sigue siendo este el instrumento que me cautiva, con el que me identifico y más cómoda me siento. 

“En el último año, junto a amigos de la escuela, probamos algunos números de la trova y fue cuando hice mis primeras voces. Tenía mucho miedo de incursionar en algo más que no fuera música de concierto. Me percaté de que, en la escuela, eran los varones los que tenían el ímpetu de experimentar, mientras a las mujeres nos costaba más decidirnos a hacer jazz, blues, trova y otros géneros. No fue hasta después de graduada que vencí esos límites que yo misma me imponía y probé”.

Su estancia en Japón, donde interpretó composiciones antológicas de nuestra música tradicional; sus primeros temas de experimentación a voz y teclado; su presentación como solista en el Museo Nacional de Bellas Artes; su peña, más recientemente, en el Café Jade, interpretando boleros y tangos; sus presentaciones en el Submarino Amarillo, son los momentos más significativos en su trayectoria. Pero, vayamos por partes.

¿Cuál fue el primer paso?

“Mi primer trabajo fue con el trovador Erik Méndez, de lo que me alegro mucho, pues me abrió puertas, me enseñó a andar por este mundo bohemio. Por eso, en 2010, di lo mejor de mí en las voces que me pidió para su primer disco. 

“Luego fui una de las fundadoras de Lego, agrupación de música popular, en la que me desempeñé como pianista y vocalista, algo distante de lo que había hecho hasta ese momento. Mezclábamos canciones con temas instrumentales… Ahí me despojé de prejuicios y temores, y decidí buscar lo que mejor me queda para expresar lo que quiero.

“En 2008 viajé a Japón como parte de un cuarteto de músicos de distintas agrupaciones, conformado por Carlos Céspedes, director del grupo Traje Nuevo. Fueron diez meses de trabajo intenso, de mucho rigor. Tocábamos cinco veces a la semana, desde la mañana hasta las ocho de la noche, frente a un público ávido de la sonoridad de nuestro país al que le ofrecimos música tradicional cubana ?a lo moderno’, con guitarra eléctrica, percusión, piano, y yo en el canto”. 

¿Qué te aportó esa experiencia?

“Me hizo crecer como músico y como persona. Aprendí que nuestra música tradicional es la base de todo lo que puedas hacer después. Como joven es posible que no me identifique ciento por ciento con esa música a la hora de crear, pero aprendí que conocerla e interpretarla bien garantiza una formación íntegra. 

“Cuando regresé, en 2009, comencé a probarme escribiendo y cantando, y un día le mostré a Dagoberto González, violinista de Pablo Milanés y productor musical de Iguales, mi primer tema. Lo compuse apoyándome en el piano, con marcada influencia de la música italiana, que me gusta mucho. Él me animó y me dio el impulso que necesitaba para convencerme de que podía hacerlo. Esa y otras canciones las he presentado en el concierto que ofrecí en Bellas Artes en enero de este año y en escenarios con otros artistas”.

La lista de estos últimos incluye a Raúl Torres, David Torrens, la pianista Bellita y su Jazz Tumbatá, Kelvys Ochoa, Tony Ávila, Cucú Diamante, Haydée y Lynn Milanés, Tesis de Menta, Vannia Borges, Anais Abreu, Aldo López-Gavilán, Harold López-Nussa, Ruy Adrián López-Nussa, Pablo Menéndez y su grupo Mezcla, Raúl Paz, Déja Vú y Augusto Enríquez, entre otros.

He oído que el disco que tienes en proceso incluirá un poco de todo. ¿Qué puedes adelantarnos?

“Es una grabación de PM Records y ha demorado más de lo previsto porque lo he hecho en la medida en que he compuesto los temas. Es, como me ha dicho Erik Méndez, muy explosivo, porque reúne las ganas de decir todo de una vez. Primero hacía versiones a piano solo y luego las transformaba para el disco. Ha sido un proceso nuevo, de descubrimiento constante de mí misma y, sobre todo, de tomar riesgos. Tiene un poco de todo, efectivamente: pop, por supuesto, y trova, en las melodías y en los textos; ritmos afrocubanos, rock, jazz, bastante de música brasileña, que me gusta mucho; funk, reggae…”

“Ofrezco la obra y espero que cada quien, al disfrutarla, la re-signifique. No puedo decir que es un disco de una cosa u otra porque hay de todo, aunque con la misma sonoridad. Cuento mis experiencias, tomo prestadas algunas, invento otras y así lo he conformado, con la ayuda de músicos excelentes como Ronny Barreto, en la batería, y Rolando Luna, en el piano, porque no quise asumir, excepto en un tema, la responsabilidad del piano en este, mi primer material. 

“Cuento también con Yandy Martínez, en el bajo; Miguel Comás, en la guitarra; Yaroldi Abreu, en la percusión, voces de Yamil Reyes y, como invitado especial, el saxofonista Germán Velazco. 

“Todavía no terminamos y busco un título, aunque tal vez me quede con Tejiendo canciones, nombre del concierto que ofrecí en Bellas Artes, porque mi entretenimiento es tejer y, mientras tejo, compongo los temas y dejo que salga lo mejor de mí”.

Integraste el elenco de Amigas, el espectáculo de Lizt Alfonso, y estuviste nominada y fuiste premiada en el Festival Cuerda Viva.

“Amigas fue una experiencia maravillosa. Asumí durante cuatro meses un personaje muy interesante e interpreté temas como Vuela Pena y Pérdoname, conciencia. Me gustó mucho la actuación y tal vez aprenda más de ella, porque en esta carrera de solista se necesita tener la capacidad de transformación y de diferencia. 

“En el Festival Cuerda Viva estuve nominada en las categorías de Mejor Agrupación Novel y Música Cubana Alternativa, en la que obtuve el premio. Fue una sorpresa para mí y me demostró que la gente me escucha y me toma en cuenta”.

En el Submarino Amarillo haces un trabajo completamente distinto.

“De eso se trata, de beber de distintas fuentes para construirme cada día, de disímiles maneras. En este lugar, donde me acompaña la banda Déja Vú, interpreto temas de los Beatles, Led Zeppelin, Pink Floyd, entre otros. 

¿Qué más tienes en proyecto?

“El futuro es ya, ahora, porque aunque trabajo en el disco todavía, estoy inmersa en la realización de un video clip, con un tema titulado Tenerme. No quiero decir más, solo que sigo con otra sonoridad, pero siempre con el afán de descubrirme poco a poco, de hacerme más yo, de muchas maneras”.