Urología cubana: retos que se avivan

Cada cuatro años los urólogos cubanos se reúnen, con el objetivo de actualizarse sobre las últimas técnicas y procedimientos que se emplean a nivel internacional en el campo de su especialidad. En esta ocasión, el XX Congreso Cubano de Urología ha tenido como premisa poner en práctica nuevas formas de tratar las dolencias urológicas y, además de elevar la calidad de vida del paciente, potenciar cada vez una menor invasión en su cuerpo.

En este empeño, a 198 delegados cubanos se les han unido participantes extranjeros y una lista de prestigiosos profesores de otras naciones, que representan parte de lo mejor de la urología en el mundo, explica la Doctora Tania González León, Presidenta del Comité Organizador del evento.

Según la doctora González, quien se desempeña como secretaria de la Sociedad Cubana de Urología, en esta ocasión el evento se ha organizado para que la atención de los delegados cubanos se centre en situaciones puntuales de la atención a los pacientes.  

“Se han tenido  en cuenta los principales problemas de salud  que hoy tenemos en el campo de la urología, como pueden ser la litiasis urinaria,  la obstrucción urinaria, los tumores, fundamentalmente los tumores de próstata, de vejiga y de riñón.  Basados en esos problemas de salud, hemos escogido los temas fundamentales del evento”.

RETOS ACTUALES DE LA UROLOGÍA CUBANA

Los principales desafíos que enfrenta el desarrollo de la urología en nuestro país están relacionados con la utilización de las nuevas técnicas y procedimientos quirúrgicos, de manera que permiten humanizar más las cirugías y hacerlas cada vez menos invasivas.

González menciona como primer reto mejorar aún más la atención al paciente en el campo de la litiasis. Añade que, aunque en Cuba hace muchos años se introdujo la cirugía de mínimo acceso en el campo de la litiasis urinaria, en la actualidad existen  novedosas tecnologías que permiten hacerlo de forma más eficiente.

Existen novedades importantes también relacionadas con la cirugía de mínimo acceso, realizadas por la vía laparoscópica, un procedimiento que se realiza en nuestro país desde hace algunos años en el Centro Nacional de Cirugía de Mínimo Acceso.

Actualmente, en este centro se trabaja en la cirugía conservadora de nefronas. “(…) no se trata de quitarle un riñón a un paciente que está aquejado de un tumor, sino de quitarle solamente la parte enferma y conservar, siempre que se pueda, la mayor masa de nefronas. Esto permite  que el paciente llegue a una edad avanzada, sin la posibilidad de presentársele una insuficiencia renal.

La doctora González León explicó que la insuficiencia renal es un padecimiento que afecta a una parte considerable del mundo y también a los pacientes en Cuba, porque tenemos la hipertensión, la diabetes, y el envejecimiento. Con respecto a este último, y considerando el hecho de que en algunos años la población envejecida aumentará considerablemente, la doctora añade: “si los urólogos nos preocupamos desde ahora en conservar las nefronas con técnicas más depuradas, con técnicas novedosas, estamos propiciando entonces una mejor calidad de vida para los ancianos que vamos a hacer en un futuro”.

TRANSPLANTE RENAL

La doctora González León asegura que el trasplante renal es de vital importancia porque sacar a un paciente de un régimen de diálisis y trasplantarlo mejora mucho su calidad de vida, y la de toda su familia; sobre todo resulta mucho más económico para la sociedad asumir una cirugía, que asumir todo un plan de diálisis.

“Los urólogos somos los que extraemos la pieza, no en el caso del cadáver, sino en el caso del paciente vivo; porque una de las cosas que permitirá aumentar el trasplante renal es desarrollar los programas de donante vivo. Es mucho más estimulante y humano para una persona sana que va a donar su riñón hacerlo mediante cirugía de mínimo acceso, que hacerlo mediante cirugía abierta”.

Realizar la extracción de la unidad renal de esta forma, unido a las ventajas que brinda, como la pronta recuperación y la disminución del dolor, contribuye a una rápida incorporación a la vida social y laboral. Han aumentado los donantes vivos en los países que ya utilizan este procedimiento o la cirugía laparoscópica como método de extracción. La doctora afirma que en esta dirección se trabaja coordinadamente con el Instituto de Nefrología.

CÁNCER DE PRÓSTATA

“El cáncer de próstata es una enfermedad que aqueja a la población masculina y forma parte de los problemas que están por resolver, no solo en Cuba, sino también en el mundo; porque no se ha logrado aumentar la sobrevida de un paciente con diagnóstico de cáncer de próstata  a no ser que se diagnostique en momentos que es muy precoz la enfermedad”, señala González.

Detectar de forma temprana la enfermedad es una de las preocupaciones de urólogos cubanos. Por eso es que se ha prestado especial atención a estudiar cuáles son las posibilidades de diagnosticar un paciente con cáncer de próstata en un punto en que la cirugía o el tratamiento que se le ofrezca sea curativo.

“La otra situación es cómo mejorar el tratamiento a los pacientes con cáncer diagnosticado, en un momento en que está avanzado y cómo hacerlo de manera que el paciente tenga menos efectos colaterales y logre una sobrevida. Pero, a pesar de que se está trabajando en eso todo el mundo, todavía los resultados no son tan halagüeños como sí lo son en el caso de la cirugía radical de próstata para el tumor prostático en el punto en que no está avanzado” explica.

Luego de varias jornadas, este viernes el XX Congreso Cubano de Urología concluirá en el Palacio de Convenciones de la Habana.

Tania González León afirma que una de sus mayores satisfacciones con el congreso es el saldo de conocimientos que se han brindado en las sesiones científicas. “Creo que hemos propiciado un marco adecuado para que los urólogos se lleven lo mejor para su casa, pero no es para su casa, es lo mejor para sus pacientes, lo mejor para sus hospitales; para que cada uno con su granito de arena contribuya a elevar la calidad de la atención de los pacientes aquejados de  afecciones urológicas”.