Saldar la deuda con los países del Sur

Tenemos el enorme reto de detener el ca­lentamiento global y la contaminación, en­frentar la carencia de agua, la pérdida de la biodiversidad, los patrones insostenibles de consumo, y el deterioro de la calidad de la vida humana y la decadencia social.

Así lo destacó la Máster en Ciencias Elba Rosa Pérez Montoya, ministra de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente, al hablar en el panel temático Nuevos modelos de desarrollo, efectuado ayer en la segunda jornada de la X Convención Internacional sobre Medio Ambiente y Desarrollo, y que contó con la participación de altas autoridades del sector de Haití, Chile, Namibia, Vietnam y Cuba.

Subrayó que nada de lo anterior podrá lograrse si no se asegura una verdadera equidad entre los países y al interior de los mismos, entendida esta como el derecho de todos a mejorar las condiciones de vida, sin pobreza, sin hambre, y sin explotación indiscriminada de los recursos naturales por las transnacionales.

Para ello, afirmó, la cooperación internacional y el apoyo financiero también resulta esencial y constituye la manera de saldar la deuda histórica de las naciones industrializadas con las del Sur, donde se concentran sus antiguas colonias, saqueadas y explotadas.

La Ministra reiteró, además, la firme voluntad del gobierno cubano de compartir sus modestos logros en la creación de capacidades científicas y en la realización de estudios de Peligro, Vulnerabilidad y Riesgos de De­sastres, principalmente con los Estados de la región del Caribe.

Dominique Pierre, ministro de Medio Am­biente de Haití, explicó que su país enfrenta un acentuado deterioro de la situación ambiental, con una cobertura forestal estimada de ape­nas el 1,5 % del territorio nacional y pérdidas en el sector agrícola que solo en el 2012 estuvieron en el orden de los setecientos millones de dólares.

Tan complejo panorama constituye una grave amenaza a la vida del pueblo haitiano, pero el gobierno con el apoyo de otros países, está decidido a enfrentar este desafío, aspecto en el cual valoramos mucho el fortalecimiento de la cooperación con Cuba, aseveró.

El viceministro de Medio Ambiente y Turismo de Namibia, Tommy Nambau, abordó las particularidades de esa nación africana, donde el problema esencial es la sequía y la falta de espacios de tierras cultivables. Dijo igualmente que la conservación del medio ambiente y el manejo adecuado de los recursos naturales son aspectos plasmados en la constitución vigente.

Por su parte, el señor Rafael Ansejo, presidente del Tribunal Ambiental de Santiago de Chile, expuso las experiencias acumuladas en la labor de esa institución, cuyos resultados ponen de manifiesto que es posible resolver de forma preventiva los conflictos am­bientales.

Finalmente el profesor Tran Hong Thai, secretario general del Servicio Hidrológico de Vietnam, se refirió a los esfuerzos del país asiático para producir alimentos, en particular el arroz, mediante la búsqueda de nuevas variedades más resistentes al aumento de las temperaturas, y al establecimiento de un programa nacional de ciencia y tecnología dirigido a proteger el medio ambiente.

Durante la sesión matutina tuvo lugar un encuentro dedicado a reflejar los resultados del V Informe de Evaluación del Panel In­tergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático (IPCC), donde trascendió que el calentamiento del planeta inducido por la actividad humana es inequívoco, ya está ocurriendo y que han sido observados en todo el orbe más de 120 impactos atribuibles total o parcialmente a ese proceso.

Como advirtieron los disertantes, si no hay una significativa reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera para el 2040, la temperatura media del planeta podría sufrir para finales del siglo XXI un incremento promedio de hasta cinco grados Celsius o más, lo cual ocasionaría mayores riesgos de consecuencias ambientales severas, generalizadas e irreversibles, disminuyendo cada vez más las posibilidades de mitigación.