Nuevas leyes en el horizonte

Más de una vez Raúl lo ha dicho: “avanzaremos sin prisa, pero sin pausa” y esa filosofía se confirma a diario en la actualización del modelo económico nacional, un proceso que no se detiene, aunque muchos no sean capaces de ver su marcha.

Hace apenas unos días, durante la reciente visita del Papa Benedicto XVI, el vicepresidente Marino Murillo reveló nuevas modificaciones a la legislación vigente para favorecer los cambios que se producen en la estructura económica del país.

Son transformaciones legales que están encaminadas a dar cumplimiento a los más de 300 Lineamientos aprobados por el Sexto Congreso del Partido, que recogió las sugerencias de millones de cubanos y las convirtió en una hoja de ruta para avanzar hacia el futuro.

Murillo enumeró al menos tres legislaciones que se estudian, y que deben ser puestas en breve a la consideración de la Asamblea Nacional para modificar el usufructo de la tierra, el pago de los tributos y la constitución de cooperativas.

Las modificaciones al Decreto ley 259, que norma la entrega de tierras ociosas, prevén ampliar la cantidad de hectáreas que se ceden, así como el tiempo del usufructo prorrogable, además de abrir la posibilidad de que los beneficiados se asocien en otras formas organizativas de producción.

También se estudia una nueva Ley Tributaria que está bastante adelantada y busca responder a los cambios originados por el proceso de actualización del modelo, de manera que la política impositiva esté más a tono con la realidad del país.

El pago de los impuestos, que por lo regular se hace en los tres primeros meses del año, está amparado por la Ley Número 73, aprobada por la Asamblea Nacional en agosto del 94, tres meses antes de la constitución de la Oficina Nacional de la Administración Tributaria (ONAT), una entidad adscrita al Ministerio de Finanzas y Precios y encargada de recaudar los ingresos del Presupuesto estatal.

Como es fácil entender, la ley en muchos aspectos ha sido superada por las transformaciones ocurridas en la economía nacional, donde el sector no estatal ha crecido de manera muy rápida y diversa.

De manera paralela se elabora una nueva Ley de Cooperativas para superar el estrecho marco legal actual, que permite ese tipo de asociación productiva solo en el sector agropecuario.

“Hoy la ley establece las cooperativas solo en el sector agropecuario, pero trabajamos para ampliarlas a otros sectores”, apuntó el vicepresidente quien recordó que en más de una treintena de Lineamientos hay referencias a esas asociaciones fuera del sistema agropecuario e incluso como cooperativas de segundo grado, que son las formadas por la asociación de un grupo de cooperativas.

Según adelantó Murillo, está cerca la presentación de esos cuerpos legales a la Asamblea Nacional, la que debe aprobarlos, probablemente en el transcurso de este año, luego del habitual proceso de discusión parlamentaria.

Ese movimiento legal demuestra el carácter estratégico y no temporal de los Lineamientos, que dan prioridad al desarrollo de las fuerzas productivas, priorizan al sector agropecuario y tienden a reforzar a aquellos sectores que generan los principales ingresos a la economía, como son el turismo, la industria niquelífera y la biotecnología.

Los cambios legislativos en ciernes también son una evidencia de que, con los pies bien afincados sobre la tierra, el gobierno avanza en un camino hacia el perfeccionamiento económico del país.