“Las donaciones son totalmente voluntarias y es un derecho legítimo que no podemos negar a nuestro pueblo, que ha dado incontables muestras de solidaridad y humanismo. Nada nos detendrá, seguiremos venciendo, con unidad y esfuerzo colectivo”.
La aclaración que hiciera en su perfil oficial en twitter, el Ministro de Economía y Planificación, Alejandro Gil, servía entonces para sellar bocas que carentes de argumentos intentaban, otra vez, colocar a Cuba en un lugar inmerecido.
Resulta que, en días recientes, titulares con la frase infausta de que “el gobierno cubano pedía dinero al pueblo” recorrieron las redes sociales y más de uno no tardó en dudar.
Las donaciones son totalmente voluntarias y es un derecho legítimo que no podemos negar a nuestro pueblo, que ha dado incontables muestras de solidaridad y humanismo. Nada nos detendrá, seguiremos venciendo, con unidad y esfuerzo colectivo. #SomosCuba #SomosContinuidad @MEP_CUBA https://t.co/Fq19sXeNCq
— Alejandro Gil Fernández (@AlejandroGilF) May 20, 2020
Manipulaban una de las medidas anunciadas por el grupo temporal de trabajo, encabezado por el viceprimer ministro y titular de Economía y Planificación, Alejandro Gil Fernández, espacio donde se colegian las decisiones que el país ha ido tomando para darle la estocada definitiva a la COVID-19, con la premisa de salvar vidas y provocar el menor daño económico.
Según argumentó la periodista Leticia Martínez, en el sitio oficial de la Presidencia de Cuba, Entonces Gil Fernández informaba acerca de la decisión de abrir cuentas bancarias para recibir donaciones de quienes habían planteado la intención de hacerlo.
Con todas sus letras la televisión cubana anunció esa noche que se debía “al interés de varias personas en realizar donaciones en efectivo”, y el sitio de la Presidencia escribía que era para “las personas naturales que lo deseen hacer ante la situación creada en el país”.
Según explicó además el titular, el efectivo que se recibiera a través de esa vía se utilizaría para la producción local de alimentos.
En ningún momento el Gobierno cubano pidió dinero a nadie, nada más alejado de la verdad. Sencillamente se habilitó una forma de canalizar los deseos de algunas buenas personas por donar, por contribuir, por dar una mano, como mismo se hizo en otras situaciones también complejas. Recuerden ciclones, lluvias intensas y el tornado en la capital.
En definitiva, nada nuevo para un pueblo habituado a compartir lo que tiene; un pueblo con una altísima vocación humanista, curtida en años de embates, y siempre presto a participar.
Días atrás en una de las videoconferencias habituales de la máxima dirección del país con los gobernadores de las provincias y el intendente de la Isla de la Juventud, el ministro de Economía reiteró: “se ha venido recibiendo por distintas vías un conjunto de solicitudes para hacer donaciones en efectivo, de personas naturales, con total voluntariedad, en función de contribuir a enfrentar los impactos de esta situación extraordinaria que el país vive, y a la cual el gobierno está dedicando cuantiosos recursos y haciendo un gran esfuerzo para afectar lo menos posible a nuestra población”.
En consecuencia, agregó, “se van a abrir cuentas bancarias en cada una de las provincias, tanto en CUP como en CUC, para que de manera voluntaria las personas naturales que lo consideren, a partir de los mismos reclamos que han venido haciendo, puedan realizar donaciones en efectivo”.
Esos recursos se van a usar exclusivamente, aseguró, para el desarrollo y fomento de la producción local de alimentos, en beneficio directo de nuestro pueblo.
Este no es un evento local, dijo, como han sido otros en los que se han recibido donaciones de distintos lugares del país. “Ahora es una cuestión más distribuida nacionalmente, por eso lo que hemos concebido para organizar mejor la tarea es que las cuentas estén en cada uno de los territorios y puedan usarse esos recursos de manera local”.
Y remató con una verdad que es imposible ocultar: “El apoyo fundamental, desde el punto de vista monetario, por supuesto que lo estamos enfrentando con cargo a los recursos del Presupuesto del Estado”.
De cuánto ha costado la osadía de este país del Caribe frente a la pandemia que ha apagado en el mundo cientos de miles de vidas, se hablará a su tiempo, sentenció casi al final de su artículo la periodista de marras quien en esta ocasión logró trasmitir encomiables lecciones sobre lo que es dar y recibir.
Términos y condiciones
Este sitio se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, que estén fuera de contexto o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social. Recomendamos brevedad en sus planteamientos.