El silencio en el terreno del estadio José Antonio Huelga permitía que el impacto de cada batazo fuera más ruidoso de lo común. A unos metros detrás del home, sentado con la barbilla descansando en su bate, Stayler Hernández disfrutó de la sesión de entrenamiento de bateo del equipo.
Desde su posición, le dejaba saber algunos consejos a sus compañeros, y luego se acercó al entrenador de bateo, Alexander Malleta, mientras pegaba sus manos al cuerpo para simular el recorrido de un swing perfecto de quien intenta golpear un pitcheo por dentro. «Estamos buscando ese swing bueno que tenemos por dentro», le dijo Malleta a Stayler mientras Andrés Hernández escuchaba cerca de ellos. «En los dos últimos juegos, hemos halado mucho los pitcheos, y ahí es donde hemos fallado con alguna que otra conexión sin la potencia acostumbrada», continuó Malleta.
Mientras bateaba Andrés Hernández y Stayler se preparaba en el plato, la retroalimentación se convirtió en el decisivo plan que necesitaban los bateadores de los Azules, buscando ajustarse contra los lanzadores granmenses.
«Todos debemos definir nuestro enfoque. Si cada uno de los muchachos hace el mejor trabajo posible con su swing y escogemos buenos pitcheos, las conexiones con fortaleza tienen que aparecer», expresó Stayler. Pero más allá del debate sobre aspectos técnicos mientras compartían sus diferentes experiencias de cara a otro juego decisivo de playoffs, Stayler Hernández no dejó de mantener el entusiasmo y transmitir la seguridad que brinda como capitán del equipo.
Con la vasta experiencia de acumular 54 juegos jugados en ocho series de postemporadas, contando el doble épico para decidir el título de Industriales en 2010, Stayler está claro del alto reto que el equipo tiene por delante: No han anotado carreras en sus últimas 18 entradas a la ofensiva y, en tres juegos, promedian sólo .210, con más ponches recibidos (15) que bases por bolas (11).
Luego de perder el Juego 3 de esta serie de Cuartos de Finales ante los Alazanes de Granma el pasado sábado, los Leones de la capital sólo tienen una opción para evitar la eliminación: Ganar y ganar, los restantes Juegos 4 y 5.
Sobre cómo está el ánimo del equipo de Industriales, los consejos cruciales para un momento como este y el enfoque a seguir tras admitir par de blanqueadas consecutivas —por segunda vez desde 1999—, Stayler Hernández conversó con CUBAHORA.
- ¿Qué tan fuerte fue el golpe competitivo de haber perdido el Juego 3 ante los Alazanes de Granma?
- Sí, fue algo duro e inesperado, porque nosotros salimos con una idea, y no pudimos alcanzarla. Después de enfrentar a Lázaro Blanco en una excelente apertura, no pudimos lograr el objetivo que perseguíamos en el siempre importante Juego 3. Cuando vamos por un propósito, estas son cosas que chocan dentro del camino, pero nosotros estamos listo para competir en este Juego 4. El ánimo sigue bien arriba, y creo que vamos a salir al terreno bien enfocados en buscar la victoria para empatar la serie 2-2.
- Como uno de los jugadores más experimentados del equipo: ¿Qué perspectivas y consejos tienes para los peloteros que no han jugado este tipo de partidos cruciales?
- Creo que la concentración es el primer factor que puede darnos la victoria. De ahí parte todo, para establecer nuestro plan en función de lo que necesite el equipo. Eso es fundamental para cualquier jugador, tanto los regulares como los que están en el banco. Ese enfoque, mantenerse mentalizado es el factor más importante a tener en cuenta en este tipo de juegos decisivos.
- ¿Confías en que Industriales puede reponerse y remontar la desventaja en los dos partidos que faltan?
- Sí, no tengo dudas. Confío plenamente en la remontada. Siempre llevamos mente positiva al terreno de juego. El playoffs todavía no se ha acabado. Está 2-1 a favor de Granma, pero aquí aún no ha terminado esta historia hasta el último out del juego de pelota. El primer paso será ir en busca de la próxima victoria que iguale las acciones, para luego enfocarnos en pelear el decisivo quinto juego. Después de sobrepasar los contagios por COVID-19, muchas situaciones y lesiones durante toda la campaña, estar juntos ahora es una bendición. Por eso debemos unirnos y seguir dando batalla en el terreno de juego.
- ¿En qué momento de los playoffs de 2010 pensaste que podían ganar el campeonato? ¿Notas que el equipo aún está inspirado?
- En aquel momento, siempre pensamos que todo era posible, y se dio el campeonato. Por eso ahora creo que si nos mentalizamos, es posible poder ganar. También sabemos que estamos enfrentando a un buen equipo, pero nosotros nos sentimos preparados y con muchos deseos de entregarnos. Hoy mismo en la práctica de bateo todos nos unimos. Hay mucho ímpetu y sobre todo deseos de aprovechar la oportunidad que nos queda para seguir luchando en estos playoffs.
- ¿Definitiva tu decisión de retirarte después de esta 60 Serie Nacional?
- Desde que comenzó la temporada me tracé esa meta y aún la mantengo. Ya creo que Stayler Hernández ha dado mucho por el equipo de Industriales y el béisbol en la capital. Eso sí, mientras esté en activo en estos playoffs lucharé por mi equipo. Así que hay que seguir batallando en el terreno de pelota, para darle el alegrón que se merece la afición de Industriales. Desde muy joven tuve la oportunidad de debutar con este equipo de Industriales y ser campeón nacional en 2004, título que luego viví por segunda vez en aquella inolvidable final de 2010 cuando decidí el Juego 7 contra Villa Clara.
Debuté ganando cuando Enriquito Díaz dejó al campo a Villa Clara en 2004, y ahora me gustaría también retirarme con otro campeonato. Yo sé que aún podemos, sólo tenemos que mentalizarnos y dar batalla hasta el final.
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