Luchas con traje y corbata

Mijaín López no vestirá su trusa de luchador durante unos días, ni su entrenador Raúl Trujillo la ropa deportiva que suele utilizar. Entre hoy y mañana sucederá, en este mes de octubre, en la ciudad griega de Creta. ¿Por qué? Los dos han sido invitados a la Asamblea General de la ACNO (Asociación de Comités Olímpicos Nacionales). Hay entretelones con toques de suspense…

“Nos falta información. Claro, imaginamos que invitaron a Mijaín por sus grandes resultados deportivos, prestigio, y a mí por ser su entrenador”, me dijo Trujillo para los lectores de Cubahora, en conversación telefónica desde su hogar en Matanzas.

“Hay aspectos que desconocemos, que los organizadores los mantienen como sorpresas”, agregó. “Sí… somos los únicos cubanos que asistiremos”, respondió.

No es nada difícil imaginárselos a los dos vistiendo elegantes sacos, con cuellos y corbata, y muy atentos a todo lo que ocurra.

Se nos disparan curiosidades (o temas inaplazables)…

• Consulte además: ¿Otra crónica para Mijaín?

En la misma Grecia, pero en Atenas, la capital, se disputaron en 2004 los únicos Juegos Olímpicos en los que Mijaín López no ha salido campeón (cuando todavía no era Mijaín). Luego resultó invencible en los de Beijing 2008, Londres 2012, Río 2016 y ahora hace unas semanas en los de Tokio 2020. Esa cuarta corona lo convirtió en el luchador masculino más laureado las citas de los cinco aros. Ninguno tiene cuatro medallas de oro. ¿Con quién perdió? El estelar ruso Khassan Baroev, de quien en estas competencias se desquitó de él en la final de Beijing 2008.

A cuatro coronas no pudo llegar ni el ruso Alexander Karelin, el “Oso Siberiano”, también de la división súper completa de grecorromana, quien consiguió tres en Seúl 1988, Barcelona 1992 y Atlanta 1996. Pero quedó en plata en Sídney 2000, perdiendo con un rival inferior: el estadounidense Rulon Gardner. Ese día, con disciplina, humildad y sentido deportivo, esperó que le alzaran el brazo a su rival. Y después, como seguro tenía previsto tras su larga carrera, desapareció de los colchones.

QUERÍA LO PROYECTARA

Raúl Trujillo, como muchos recuerdan, vamos a rendir otro homenaje en estos renglones, llegó para seguir con mucho éxito el trabajo del anterior técnico de Mijaín López: el histórico e inolvidable Pedro Val, quien incluso fue reconocido por la entonces federación internacional de luchas como el mejor entrenador del mundo de la grecorromana en el año 2010.

Otro punto: lo más seguro es que muchos lectores recuerden aquellas imágenes cuando Mijaín ganó su tercera de oro en Río 2016: Hubo un momento, dando rienda suelta a su alegría, en el cual… ¡proyecto sobre el colchón a Trujillo!

“Es una forma de festejar”, me dijo poco después el entrenador.

¿Y te gustaría que pudiera volver a hacerlo cuando terminen los Juegos Olímpicos de Tokio 2020?, le pregunté.

“Claro que sí… me haría el entrenador más feliz del mundo”.

La carrera de López, desde ciertos ángulos, debía haber terminado el año pasado, es decir en el 2020, con esos Juegos Olímpicos de Tokio que por la pandemia tuvieron que ser aplazados para 2021.

En la capital nipona triunfó como todo un jovenzuelo. Pero en realidad cuando redondeó tal hazaña, el pasado 2 de agosto, le faltaban 18 días para cumplir 39 años de edad (su fecha de nacimiento es 20 de agosto de 1982). Todo ello pudo hacer pensar que sería el adiós a su exitosa carrera, que incluye también cinco de oro y tres de plata en Campeonatos Mundiales. Pero la facilidad con la que ganó, su maestría deportiva, consagración a los entrenamientos, el respeto que inspira, y su edad biológica (cuando tenía 37 años se le calculó en 30 o 31), han abierto una interrogante: ¿Competirá en los Juegos Olímpicos de París 2024?

“Esa es una decisión muy propia de Mijaín. La estamos estudiando. Serían tres años más de carrera deportiva. Repito: es algo muy personal”, nos dijo hace poco el propio Raúl Trujillo.

Quizás de todo ello hayan vuelto a conversar en los aviones en el largo camino hacia la ciudad griega de Creta…