Erislandy Savón y su "derecha prohibida"

Hace apenas un año, el boxeo viene recuperando el terreno perdido entre los amantes al deporte en la Isla. Modalidad que más títulos olímpicos y mundiales ha aportado en la historia del movimiento deportivo cubano, las peleas invitaban al bostezo. Además, sus seguidores habían dejado de confiar en esos resultados, y la“gota que colmó la copa” fue el regreso a la patria sin títulos en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008.

Entrenadores y federativos se llamaron a capítulo, tomaron las medidas pertinentes y, todo ello, unido a la erradicación del uso de la cabecera y el anuncio de que una franquicia cubana (Domadores) debutaría en la venidera Serie Mundial de Boxeo (WSB, por sus siglas en inglés), en noviembre, colmaron nuevamente las expectativas de los partidarios al más viril de los deportes. Los alumnos de la Escuela Nacional de Boxeo han trabajado con ahínco y los buenos frutos ya se recogen.

Recientemente, superaron 7-3 a los Guerreros de México, en match de ensayo de cara al inicio de la WSB, y luego ganaron por países el título en el tradicional torneo Cinturón de Oro, en Rumanía, con cota de cuatro fajas y dos medallas de plata.

Y uno de los cuatro boxeadores invictos —si se suman ambos torneos, su cota fue de cuatro éxitos—fue el guantanamero monarca panamericano ErislandySavón (91 kg), quien, tras su llegada a Cuba, hizo declaraciones a Cubahora.

—Dentro de este joven colectivo, eres uno de los más experimentados. ¿Qué opinión te ameritan estos buenos resultados del equipo, a solo un mes del inicio del Campeonato Mundial?

—Nosotros nos propusimos recuperar la hegemonía del boxeo cubano. Estamos entrenando más concentrados y con una disciplina técnico-táctica superior. El objetivo es ganar el título por colectivos en la cita mundialista y el tope oficial contra los Guerreros de México, en noviembre.

—Por cierto, en ese venidero match ante la franquicia centroamericana, es casi seguro que enfrentes nuevamente al uzbeco FarrukhKarimov, uno de los tres foráneos que integraron esa plantilla, a quien le propinaste sensacional nocaut técnico.

—Sí, esa es la principal contratación de ellos. Tiene una buena preparación y es muy fuerte, al extremo que, como ustedes vieron, casi me pone fuera de combate. No quiero justificarme, pero te comento que me cogió sorprendido y no pude defenderme de sus golpes. Pero me salvó la campana y ya vieron lo que sucedió después: le pegué con potencia y buena precisión con ambas manos, e incluso, el impacto que lo envía definitivamente a la lona fue con la izquierda y yo soy derecho. Ahora, solo me resta ver el video y corregir los errores de ese combate para que no se repitan en noviembre.

—Siete triunfos y solo tres derrotas contra los Guerreros, semifinalistas en la última edición de la WSB. ¿Qué me dices de este resultado favorable en el debut cubano?

—El grupo quería probarse a ese nivel, bajo el reglamento de la AIBA (Asociación Internacional de Boxeo Aficionado) para esa Serie: peleando cinco asaltos, sin cabecera y con guantes de 12 onzas. Y creo que demostramos que sí estamos en condiciones de hacer un buen papel en la venidera Serie Mundial.

—Pero después del match con los Guerreros, se trasladaron a Rumanía, donde eliminaste a otros tres “mastodontes” en el Cinturón de Oro. ¿Has cambiado la preparación?

—No, yo sigo entrenando igual, pero he dedicado especial atención a la defensa, con la mano siempre arriba, buscando mayor velocidad sobre el ring y mejores movimientos del tronco.

(Les recuerdo a los lectores que Savón se había iniciado en los 91 kilogramos. Luego, en la selección nacional hubo un “bache” en los pesos supercompletos y los entrenadores decidieron subir al guantanamero. Pero no le fue nada bien en esa división).

—¿Satisfecho con el retorno a los 91 kilogramos?

—Seguro que sí. Yo jamás he pesado más de 93 kilogramos, y en los supercompletos, debía enfrentar a rivales de hasta 120 y 130 kilos, con los cuales tenía que inventármelas para no sufrir un potente golpe. Sin embargo, eso me convino, pues ahora asimilo más los impactos de mis rivales, tengo más velocidad sobre el encerado y, con mi efectivo jab de izquierda, los mantengo a distancia y preparo mejor mi ataque.

Entonces, solo resta esperar para ver si, en los certámenes que se avecinan, Savón continúa con esa mano derecha prohibida, para darle más triunfo al equipo nacional. ¿Qué me dicen?