El buque insignia y sus tres destinos antes de anclar en Tokio

La historia se repite. Como siempre sucede, cada cuatro años los especialistas del Instituto Nacional de Deporte y Recreación (INDER) y todo el pueblo ponen su mirada, una vez más, en el boxeo, ese bien llamado buque insignia del deporte cubano, de cara a una buena ubicación por países en los venideros Juegos Olímpicos de Tokio 2021.

Ya no hay espacio para más. Este viernes, y después de mucho entrenamiento bajo el sistema de "burbuja" en la Escuela Nacional Orbeín Quesada con el cumplimiento de estrictos protocolos de bioseguridad para evitar contagios con la COVID-19, la selección cubana saldrá rumbo a Alemania, primer destino de los tres planificados antes de retornar a La Habana el próximo 22 de junio.

Según ha trascendido -Cubahora no puede confirmarlo porque la prensa no podía acudir-, el entrenamiento de los ocho boxeadores en la llamada Finca del Wajay se realizó con una disciplina excelente y se lograron parámetros muy buenos desde el punto de vista físico. Pero esta es, sin duda, algo así como "la mitad de la tarea", pues falta una parte tan trascendental como es la de los combates con rivales foráneos.

Y eso es lo que buscará en la cercana gira de más de un mes, el avezado jefe de entrenadores Rolando Acebal, muy exigente en las horas de entrenamiento, pero conocedor de que un sparring (intercambio con guantes) entre dos púgiles que se conocen, dista mucho de ser tan efectivo como un combate real contra un rival desconocido, máxime si es del poderío de un europeo.

Está previsto que el equipo nacional de ocho púgiles salga este viernes para Alemania donde estarán preparándose alrededor de 12 días en un entrenamiento conjunto con atletas de Mongolia, Kazajistán y algunos locales.

Una vez culminada su estancia en Alemania, la ruta crítica del grupo cubano de cara a la cita olímpica de Tokio prevé un traslado a México, donde realizarán una base de entrenamiento de unos 13 días, además de intervenir en un evento que tiene prevista la participación de boxeadores clasificados a Tokio y otros con experiencia profesional.

Y al finalizar sus acciones en territorio azteca, Acebal y sus ocho discípulos partirán rumbo a Holanda, donde efectuarán entrenamientos conjuntos y posibles combates frente a púgiles locales durante 12 días. Después de cumplir sus tareas en este tercer destino, el grupo regresará a La Habana.

El potente equipo cubano lo integran varios campeones mundiales y olímpicos, entre ellos el espirituano Yosvani Veitía (52 Kg), Lázaro Álvarez (PRI, 57 Kg), Andy Cruz (MTZ, 63 Kg), Roniel Iglesias (PRI, 69 Kg), el peso semicompleto guantanamero Arlen López y el capitán Julio César La Cruz, oro olímpico y tetracampeón del orbe, quien aparece en la división de 91 kilogramos.

La nómina se completa con el superpesado camagüeyano Danier Peró (+91 Kg) y el mediano agramontino Yoenlis Feliciano Hernández (75 Kg).

Como se conoce, a raíz de la suspensión del torneo Preolímpico de América, Cuba tendrá a siete boxeadores en la cita bajo los cinco aros, debido que los boletos se determinarán a través del ranking.

Quien sí tiene bien complicada su clasificación es Yoenlis Hernández, único aún sin boleto,  porque lucharía contra 13 plazas que el COI seguramente priorizará a los atletas de países con tradición y no tienen a ningún clasificado. Hay que esperar para ver si Cuba puede asistir a Tokio con equipo completo.