De nuevo a la mesa de diálogo

Casi al finalizar esta semana, el gobierno de Venezuela y las oposiciones integradas en la llamada Plataforma Unitaria comenzarán un tercer ciclo de negociaciones en México, en medio de un clima ligeramente hostil por la injerencia de Colombia y algunas voces internas desacertadas.

México vuelve a ser sede del diálogo que recomenzará este viernes y se extenderá hasta el próximo lunes, tras prometedoras partidas del 13 de agosto y 4 de septiembre, considerados prometedores por las partes.

Aunque lograron algunos acuerdos consensuados, y el programa de conciliación se cumplía con respeto por las respectivas delegaciones, algunos indicios pusieron en alerta al gobierno del presidente Nicolás Maduro.

El jefe de la delegación gubernamental, Jorge Rodríguez, afirmó que hay ¨un intento de ¨sabotear, condicionar y evadir compromisos establecidos en el Memorando de entendimiento suscrito el pasado 16 de agosto por parte de participantes en las negociaciones.

Aun cuando Rodríguez, también presidente de la Asamblea Nacional de su país, se siente animado ante el reinicio del diálogo con el sector opositor más radical, alertó a los países acompañantes en México – Noruega, Rusia, Países Bajos–  del intento de una ruptura entre los equipos negociadores, lo cual no sería la primera vez que ocurre.

Son varias las señales negativas dadas por la oposición radical, que también aceptó participar en las elecciones regionales de noviembre próximo, cuando boicoteó otras anteriores, a pesar del llamado oficialista de que formaran parte del proceso.

Si las grietas que empiezan a notarse en el diálogo de paz y conciliación profundizaran, es posible que Plataforma Unitaria decidiera retirarse no solo de México sino también de los comicios, en la que participará como un bloque, lo cual sería un retroceso en la búsqueda de la conciliación nacional que defiende el presidente Maduro.

En un comunicado difundido en Caracas, el jefe de la delegación oficialista afirma que ¨con sorpresa y vergüenza¨ el país vio ¨graves hechos y peligrosas declaraciones¨ que pondrían en evidencia ¨la naturaleza criminal de la operación de saqueo y robo al patrimonio¨ que habría emprendido el exdiputado Juan Guaidó, autoproclamado presidente interino en enero de 2019 y tomó el control de varios activos del Estado venezolano en el exterior bajo el argumento de ¨protegerlos de la dictadura¨.

Aunque Guaidó aceptó la inclusión en el diálogo y en las mega-elecciones de noviembre, continúa aliado a Estados Unidos, su principal promotor y a Colombia, cuyo presidente Iván Duque desbarró contra Venezuela, esta vez en su reciente discurso en la actual Asamblea General de Naciones Unidas.

Ante la sorpresa de los presentes en Nueva York, Duque destacó, en su obsesiva política contra Venezuela, que los diálogos son esperanzadores pero no hay, dijo, que ser ingenuos con sus resultados.

"Los diálogos entre el Gobierno interino de Venezuela, que encarna la resistencia democrática, y la narco-dictadura, si bien dan alguna esperanza, no nos permiten ser ingenuos, pues el único desenlace efectivo de ese encuentro es la convocatoria cuanto antes de una elección presidencial, libre, transparente y con una minuciosa observación internacional¨, precisó el dignatario.

Lo cierto es, indican analistas, que el colombiano quiere apropiarse del dinero venezolano.

Aunque una de las peticiones del gobierno de Caracas en la mesa de diálogo es la devolución de sus activos retenidos por órdenes de Washington en distintas instituciones extranjeras, Duque tiene en la mira a la empresa propiedad del Estado venezolano Monómetros, cuya filial de Pequivén radica en territorio colombiano.

Hace pocos días, el régimen derechista de Colombia anunció la toma de control de la compañía. Tras conocerse esta medida, la Justicia venezolana abrió una investigación en contra de Guaidó por ¨usurpación de funciones, traición a la patria, conspiración, hurto calificado de activos y asociación para delinquir¨.

El falso mandatario mantiene una relación política oficial con Duque, quien en los últimos años –siguiendo órdenes de Washington-  propicia y apoya sus fracasadas aventuras, en tanto presta su territorio para el impulso a acciones violentas contra su vecino, incluido magnicidio y atentados a instituciones.

Otro punto de fricción es la carta de la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro que podría autorizar la venta de acciones de Citgo Petroleum, propiedad de la estatal venezolana Petróleos de Venezuela (PDVSA) en EE.UU., a partir de enero de 2022, como lo anunció Carlos Vecchio, dirigente de la oposición y prófugo de la justicia venezolana..

La representación del gobierno venezolano considera además que las declaraciones de los radicales partidos Voluntad Popular y Primero Justicia ¨revelan una feroz pugna de grupos e intereses por el control de ambas empresas y la intención de desnacionalizar estos activos o de asignárselos a poderes extranjeros¨.

Otra señal de que la nueva fase del diálogo comienza con dificultades apareció esta semana luego que varios sectores opositores expresaron su malestar al anuncio de la incorporación del diplomático Alex Saab a la mesa de diálogo. Saab, según las autoridades venezolanas, está detenido de manera ilegal en la isla de Cabo Verde desde 2020, a petición de la Casa Blanca.

Este empresario colombiano fue nombrado por Maduro como enviado especial y representante permanente adjunto de Venezuela ante la Unión Africana y embajador plenipotenciario cuando ya estaba detenido, por lo que no aplica la inmunidad diplomática.

Para Rodríguez, Saab está ¨secuestrado en una cárcel en el extranjero¨ y en su caso ¨se ha violado toda la normativa internacional, los derechos humanos y los derechos al debido proceso¨.

La oposición replicó al anuncio asegurando que continuará el diálogo pese a la decisión de incorporar al diplomático, pero esclareció que, en su opinión, la petición solo responde a una "estrategia de defensa" ante el proceso judicial.

El equipo de prensa de Guaidó, que ya no es reconocido ni siquiera por sus exaliados como presidente interino autoproclamado en un parque caraqueño,  fue agresivo y calificó el nombramiento de Saab como un plan para evitar un proceso de extradición".

Desde Caracas, en rechazo a las tentativas de sabotear, condicionar y evadir compromisos establecidos en agosto en el memorando de entendimiento, Rodríguez apeló a la inteligencia de sus interlocutores en el diálogo propuesto por México para impedir la ruptura de los acuerdos parciales ya suscritos.

Otra voz que se alzó de inmediato contra las supuestas preocupaciones del llamado Duquesito colombiano, fue la del ministro de Defensa venezolano, Vladimir Padrino López, quien lo calificó de ¨representante legítimo de la oligarquía narcotraficante colombiana que trata de impedir la consolidación de la paz en Venezuela, y no, como señaló el guerrerista mandatario ¨sacar a la dictadura¨ de Maduro.

"Ocúpese del desastre social que impide el desarrollo de su pueblo. Ocúpese de garantizar los derechos humanos en Colombia. Ocúpese de la tan vapuleada democracia por élites corruptas que sirven a su narco tiranía. La Venezuela de Bolívar siempre seguirá victoriosa!", le respondió la vicepresidenta venezolana Delcy Rodríguez a los llamados de odio de Duque.

En su segundo encuentro en México, el gobierno y la Plataforma Unitaria acordaron "la ratificación y defensa de la soberanía de Venezuela sobre la Guayana Esequiba" y la "protección económica y social de los venezolanos".

Las partes también acordaron establecer mecanismos de restauración y consecución de los recursos para atender las necesidades sociales de la población, con especial énfasis en los efectos de la pandemia por covid-19, incluyendo aquellos provenientes de organismos multilaterales", indicó en un comunicado Noruega, que impulsa el proceso.

En las últimas semanas, Venezuela sufrió nuevos ataques preparados y financiados en el exterior, como el atentado contra plantas generadoras de energía, y el registrado contra el sistema informático del Banco Nacional, gestado desde EE.UU., según las autoridades locales.

El ataque fue calificado de ¨intenso y agresivo¨, pues duró cinco días y mediante el sistema de protección anti-intrusos (IPS) pudo determinarse que la huella del sabotaje se encuentra en territorio estadounidense. Los enemigos del proceso político venezolano buscaban degradar el funcionamiento natural y normal del sistema para dañar la unidad clave de la plataforma bancaria y sabotear la implantación del Bolívar digital, nueva expresión monetaria de ese país.

Es en este contexto de presiones y de reuniones de Duque con el jefe del comando sur de EE.UU. Graig Faller, y el prófugo de la justicia de Caracas, Leopoldo López, que tendrán lugar las nuevas conversaciones en México.

Todavía están presentes en el recinto de la Asamblea General de la ONU las denuncias de Maduro sobre la arremetida de los derechistas radicales contra su país, en tanto elogió la política de paz de su administración, que logró que sus detractores vuelvan a la política, a la Constitución y al camino electoral.

Las miradas están puestas México, donde la paz en Venezuela tiene este fin de semana una nueva chance.