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viernes, 15 de noviembre de 2024

Donald Trump: A por las armas

El nuevo presidente de los Estados Unidos propone un presupuesto récord para desbordar los arsenales militares norteamericanos...

Néstor Pedro Nuñez Dorta en Exclusivo 02/03/2017
1 comentarios
Donald Trump
Trump abogará por “recuperar el poderio militar nacional y volver a ganar guerras”.

Y sí…realmente va imponiéndose la norma de que resulta un fiasco asumir literalmente cada mensaje político de la nueva administración estadounidense.

Y lo peor no es porque  pueda tener errores formales o fundamentos no explicados en el grado necesario…sino porque, sencillamente, lo dicho ayer se contradice hoy, y lo anunciado y recalcado a bombo y platillo en una ocasión, se convierte en lo contrario horas, días o meses después.

¿Acaso no abogaba Trump por relaciones constructivas y alianzas antiterroristas con Moscú y ahora se le considera un interlocutor fallido hasta tanto el Kremlin no haga lo que se desea en la Oficina Oval?

¿No era China el gran devastador de la economía norteamericana contra el que se debía levantar una guerra de aranceles y presiones, y  más tarde no solo se habla de entendimiento y negociación con Beijing, sino que hasta se apoya la línea del gigante asiático sobre la existencia de “un solo país” a pesar del provocador contacto del nuevo presidente de USA con las autoridades de Taiwan en plena  inauguración de su mandato?

En fin, el funcionamiento al píe de la letra de ese viejo proverbio que establece que “donde dije digo, dije Diego”.

Y valen estos recordatorios precedentes, porque lamentablemente hay que acostumbrarse de una vez a que no caben vaticinios rotundos en el caso de la actual Casa Blanca.

De hecho, otro dislate se suma a los anteriores luego que el presidente, que tanto proclamó que el mundo requiere de negociaciones y no de imposiciones, anunciase un presupuesto militar récord para la primera potencia capitalista que significa un sustancial aumento en los gastos bélicos con relación a las ya abultadas cifras del año precedente.

¿El propósito? Pues, según las agencias de prensa que dicen citar al propio Trump, se trata de calzar el empeño de “recuperar el poderío militar nacional y volver a ganar guerras” mediante  la “reconstrucción de las empobrecidas fuerzas armadas de Estados Unidos en el momento en que más las necesitamos.”

En pocas palabras, agigantar aún más los mecanismos de agresión y amedrentamiento elevando en un nueve por ciento adicional los 600 mil millones de dólares que como última partida aprobada por su gobierno, había asignado el saliente Barack Obama al complejo militar industrial y al Pentágono como complemento para que los verdaderos poderes fácticos estadounidenses sigan intentando redondear sus aspiraciones de jefes supremos a escala global.

Vale notar en esta historia, para que se comprenda lo que este incremento representa de manera objetiva, que desde hace buen tiempo los gastos militares norteamericanos son superiores en muchas veces a la suma de las erogaciones que dedican las diez naciones que siguen en la lista a los Estados Unidos en tan peligroso menester.

Con la característica, ahora bajo el mandato del díscolo magnate inmobiliario, que el dinero que engrosará tales fondos provendrá, además, de sensibles recortes en la ayuda exterior norteamericana, una medida que, seguramente, no rozará con un pétalo las partidas multimillonarias que se asignan anualmente a Tel Aviv como principal gendarme hegemonista en Oriente Medio y Asia Central, las mayores que Washington envía a nación alguna.

Las primeras reacciones adversas a esta decisión presupuestaria hablan de que resulta una grave amenaza a la precaria paz mundial y al equilibrio global de fuerzas, riesgo que no puede esconderse bajo la pretendida justificación de que se trata de que los Estados Unidos no pierdan su “tradicional influencia externa ni vean amenazada su seguridad”.

De manera que mientras Washington insiste en seguir valiéndose de abultados arsenales como instrumento de supremacía, lamentablemente no hay otra salida para el resto de la humanidad que seguir viviendo sobre la cuerda floja de la violencia, la agresividad y el trance cierto de verse achicharrada por completo.


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Néstor Pedro Nuñez Dorta

Periodista

Se han publicado 1 comentarios


Víctor Hugo FS
 2/3/17 21:25

"Volver a ganar guerras”, ahí está. Trump con eso avisó que pondrá uniformes a sus votantes para que luchen en próximos conflictos armados en defensa de "América."

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