Temporada ciclónica 2014, algunos datos de esta

Cuando llega el mes de mayo, nos percatamos de la proximidad de dos eventos, muy relacionados. Es mayo el mes en que el Estado Mayor de la Defensa Civil  organiza cada año el Ejercicio “Meteoro” para preparar mejor a la población y la economía para enfrentar eventos capaces de ocasionar desastres, tales como las tormentas tropicales y huracanes. Un poco después, llega el primero de Junio con el inicio de la Temporada Ciclónica, o de Huracanes, en el área del océano Atlántico, mar Caribe y el golfo de México.

En este marco, también comienzan las pregunta acerca de cómo será la próxima temporada ciclónica y si habrá peligro de un ciclón tropical para Cuba,  relacionándolo con los pronósticos de temporada que se emiten por varias entidades de un grupo de países y que aparecen profusamente en los medios, aunque cuando se dice que la temporada no será muy activa no abundan mucho. Esta es una muestra del sensacionalismo mediático que acompaña a estos pronósticos y que no ayuda en nada a su comprensión por parte de la población.

Como también a mí me llegan continuamente estas preguntas, pero antes de pasar de lleno al tema, haciendo algunas aclaraciones, como también las hice el pasado año y el anterior por esta época, deseo explicarles qué son y cómo funcionan los modelos de pronóstico de temporada.

Los modelos o métodos de los que se vale el meteorólogo para pronosticar el tiempo diariamente o para pronosticar la trayectoria e intensidad de un ciclón tropical que realmente se encuentre desarrollándose en un momento dado son muy exactos en el corto plazo. Se emplean modelos dinámicos, basados en las ecuaciones de la termohidrodinámica, que parten de un momento inicial y mediante procesos físico-matemáticos llevan al estado futuro de la atmósfera. Son de muy buena calidad en el corto plazo (inferior a 3 días o 72 horas). Los modelos estadísticos dejaron de emplearse hace años debido a que fueron superados grandemente por los modelos dinámicos.

Los llamados pronóstico de temporada ciclónica son muy diferentes de los pronósticos usuales del tiempo de los que hablé en el párrafo anterior. Los modelos empleados para dicho pronóstico son de naturaleza estadística, y por tanto sus resultados se alejan de los valores extremos, acercándose más a los valores medios. Además, estos modelos toman elementos resultantes de otros pronósticos previamente hechos, por ejemplo, los del pronóstico del evento “El Niño”. Por tanto, si el pronóstico de “El Niño” no resulta de acuerdo a lo previsto, el pronóstico de la temporada ciclónica tampoco resultará correcto.

Pero voy a lo práctico. Cuando comenzaron a realizarse los pronósticos de temporada ciclónica a principios de los años 80 del pasado siglo por el Prof. William Gray y su equipo en la Universidad Estatal de Colorado, EE.UU.,  los Medios hicieron lo magnificaron e hicieron que fuera algo esperado cada año por la población. Sin embargo, se descuidó la interpretación que el lego, no especialista, le podía dar. De ahí que de un hecho de innegable valor científico y cognitivo, se pasó a una información que la población espera, sin que se percataran, en realidad, de su verdadero significado.

Cuba fue el segundo país del área en desarrollar un modelo de predicción estacional de ciclones tropicales, en un equipo del Centro Nacional de Pronósticos del Instituto de Meteorología, por parte de un proyecto de investigación lidereado por la Dra. Maritza Ballester en 1986. También fue el primer Servicio Meteorológico en hacerlo, pues la NOAA de EE.UU. comenzó después. Hay que decir que en Cuba ha ocurrido algo parecido, pues el verdadero significado del pronóstico de temporada ciclónica muchas veces se echa a un lado, concentrándose la información en si la temporada va a ser activa, y si así fuera en dicho pronóstico, se toma la errónea asunción de que entonces Cuba puede ser afectada con una mayor probabilidad.

¿Cómo interpretar un pronóstico de la Temporada Ciclónica?. Estos pronósticos ofrecen, por lo general, la cantidad total esperada de ciclones tropicales con clasificación de tormenta tropical y huracán, tambien la cantidad de huracanes y las de huracanes de gran intensidad, categorías 3, 4 y 5 en la escala Saffir- Simpson. Observen que son cantidades totales, para toda la cuenca del océano Atlántico, incluyendo el mar Caribe y el golfo de México. Una temporada activa es aquella que supera la suma de 10 tormentas tropicales más huracanes,   la cifra promedio de muchos años. En cuanto a los huracanes, la cifra promedio es 6, mientras que la de huracanes de gran intensidad es 2. Cifras de totales en unma gran área oceánica. Nada más.

¿Azotará algún ciclón tropical este año a San Juan, Puerto Rico; o a Nueva Orleans en Louisiana, EE. UU.; o a La Habana, Cuba; o a algún otro punto específico dentro de la vasta geografía de nuestra área?. NADIE LO PUEDE DECIR NI TAMPOCO EL PRONÓSTICO DE LA TEMPORADA CICLÓNICA. Esta es la gran limitante y de ahí su muy escaso uso práctico, sin tomar en cuenta de si dicho pronóstico se cumple o no.

En ese sentido, que una temporada se pronostique activa o muy activa, digamos con un total de 16, 18, o 20 tormentas tropicales más huracanes; o que se pronostique de normal a poco activa, con 10, 8 ó 6 tormentas tropicales más huracanes, NO SIGNIFICA NADA PARA UN PUNTO O LUGAR ESPECÍFICO….

Algunos ejemplos de lo anterior: en 1995 se registró la segunda temporada ciclónica más activa del siglo XX con una cifra de 19 tormentas tropicales y huracanes; sin embargo, ninguno se acercó siquiera a Cuba. La de 1930 fue una temporada muy poco activa. Hubo sólo un huracán, pero fue el huracán de ¨San Zenon¨, que con Categoría 5 destruyó completamente a la ciudad de Santo Domingo en la República Dominicana. Lo mismo ocurrió en 1992, una temporada poco activa, pero el huracán ¨Andrew¨, también Categoría 5, ocasionó inmensos daños en el sur de La Florida, EE.UU. En ambos casos de temporadas muy poco activas: ¿Lo serían para los habitantes de Santo Domingo en 1930 y para los del sur de Miami y La Florida en 1992?

Por ello, no vale perder el tiempo con estas preguntas. Ante una nueva temporada ciclónica preocupémonos y ocupémonos de ESTAR SIEMPRE BIEN PREPARADOS; y cuando ocurra un ciclón tropical de cualquier clasificación o categoría en zonas relativamente cercanas a Cuba: SEGUIR LOS PRONÓSTICOS Y AVISOS DEL CENTRO NACIONAL DE PRONÓSTICOS DEL INSTITUTO DE METEOROLOGÍA Y LAS ORIENTACIONES DE LA DEFENSA CIVIL. Esa es la verdadera interpretación práctica.

Sin embargo, el deseo de conocer y la curiosidad son siempre válidas. Entonces les diré que todo apunta hacia una temporada ciclónica 2014 con actividad general normal o inferior a la normal  entendiéndose por esto el promedio de muchos años. La causa principal radica en que los modelos para el pronóstico de ¨El Niño¨ indican que se está generando un evento tal en el océano Pacífico oriental y que es probable que se desarrolle durante la temporada ciclónica (Ver gráfico al final de este artículo)

Y para que no se tenga que buscar en otras fuentes, los dejo con un cuadro resumen de todos los pronósticos de la temporada ciclónica del 2014 emitidos hasta hoy para el área del Atlántico, mar Caribe y golfo de México, de manera privada o pública, pero por favor LÉANLO Y ANALÍCENLO tomando en consideración todo lo que anteriormente he escrito, principalmente en los últimos tres párrafos, para que hagan una correcta interpretación de esta información…. (Resumiendo: que sea una temporada poco activa no es para dejar de preocuparnos en un momento dado, estos pronósticos no significan nada para un punto, lugar o país específico, por ello no tienen realmente un uso práctico; y si fuera una temporada muy activa, ocurriría exactamente lo mismo. RECORDAR QUE SIEMPRE HAY QUE ESTAR PREPARADOS, PARA EL MOMENTO EN QUE SURJA UN CICLÓN TROPICAL RELATIVAMENTE CERCA DE CUBA) Y dicho todo esto, es similar a parafrasear a mi amigo Taladrid… ¨Saquen Uds. Sus propias conclusiones¨.…

A continuación les presento la Tabla:

PRONÓSTICOS PARA LA TEMPORADA CICLÓNICA O DE HURACANES 2014

INFORMACIÓN ESTADÍSTICA BÁSICA

PRONÓSTICOS  EMITIDOS PARA LA TEMPORADA 2014 (HASTA EL 10.05.2014)

Notas: WSI: Weather Services International— realizados por meteorólogos de una compañia subsidiaria de  The Weather Channel o Canal del Tiempo en los EE.UU.*

TSR: Un consorcio público que consiste en expertos de los seguros, de administración de riesgos y pronóstico estacional en lal University College de Londres, Reino Unido.

CSU: Pronóstico realizado en la Universidad estadual de Colorado (Colorado State University) por los renombrados científicos Philip J. Klotzbach, William Gray, y sus asociados.

NCSU: Universidad Estadual de Carolina del Norte (North Carolina State University), realizado por un equipo de científicos encabezados por el Dr. Lian Xie.

INSMET: Realizado por un equipo encabezado por la Dra. Maritza Ballester, Centro Nacional de Pronósticos, INSMET, Cuba.

La NOAA de los EE.UU. no emite su pronóstico de temporada hasta  finales de mayo de cada año, justo antes del comienzo de la temporada ciclónica.

En el gráfico, los diferentes modelos, tanto dinámicos como estadísticos, que muestran un consenso hacia un evento ¨El Niño¨ en los meses del verano, cuando ocurre la temporada ciclónica en el Atlántico. En un evento ¨El Niño¨ las aguas del océano Pacífico oriental aumentan su temperatura y su contenido calórico. La energía se transmite por las nubes de tormenta a la atmósfera superior y se producen fuertes corrientes de aire, que corren de oeste a este sobre el Atlántico y el Caribe, a unos 10 a 12 kilómetros de altura, lo que inhibe, o disminuye, la formación y desarrollo de ciclones tropicales.

LISTA DE NOMBRES DE LAS TORMENTAS TROPICALES Y HURACANES APROBADOS PARA SER EMPLEADOS DURANTE LA TEMPORADA CICLÓNICA DEL 2014

Nota:

Las listas de nombres de las Tormentas Tropicales en el área del océano Atlántico, mar Caribe y Golfo de México son aprobadas por el Comité de Huracanes de la Asociación Regional IV de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), compuesta por representantes de todos los Servicios Meteorológicos de los diferentes países del área.