Medio ambiente y desarrollo: desafíos cubanos

Con la premisa de que “urge un cambio trascendental para el futuro que queremos”, investigadores, educadores, especialistas, gestores, empresarios y productores comparten por estos días en La Habana retos y soluciones ante los problemas relacionados con el cuidado y la preservación de la naturaleza, en la IX Convención Internacional sobre Medio Ambiente y Desarrollo.  

El evento tiene una amplia agenda que, según la titular del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA), Elba Rosa Pérez Montoya, llama a la necesidad de construir sociedades más justas, establecer nuevos modelos de desarrollo, lograr un orden internacional más equitativo basado en el respeto al derecho de todos, asegurar el desarrollo económico y social sostenible y priorizar la utilización de los avances de la ciencia, la tecnología y la innovación al servicio del medio ambiente.”

Los enormes desafíos que representan los temas ambientales para la humanidad fueron trazados por la ministra cubana este martes. Según pronósticos oficiales citados por Pérez Montoya, para el 2030 el crecimiento de la población mundial alcanzará una cifra cercana a los ocho mil millones de habitantes, por lo que se calcula que el mundo necesitará de un 50 % más de alimentos, un 45 % más de energía y un 30% más de agua, en un momento en el que la crisis ambiental impondrá nuevos límites a la utilización de los recursos naturales.

De acuerdo con la Presidenta del Comité Organizador del evento, Dra. Gisela Alonso Domínguez, ante tales preocupantes pronósticos aumenta la importancia de la Convención, porque busca promover la cooperación entre los países, el intercambio de experiencias y conocimientos que aseguren un futuro económico, social y ambientalmente sostenible y poner los avances de la ciencia y la tecnología al servicio de la salvación del planeta y de la dignidad humana.

En la sesión de este martes, sobresalió la intervención de Margarita Astrálaga, directora de la Oficina Regional para América Latina y el Caribe del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) quien destacó la labor de Cuba para enfrentar huracanes y desastres naturales.

“La isla tiene mucho que enseñar en materia de prevención, cómo evita las pérdidas humanas mientras en otras naciones mueren miles de personas por esos fenómenos”, aseguró Astrálaga, quien considera que el mundo está llegando a un callejón sin salida debido al carácter inequívoco y acelerado del calentamiento global.

En la cita se conoció que el país cuenta con más de 200 áreas protegidas, de significación nacional y local, de las cuales 120 poseen administración y manejo efectivo de sus reservas.

Estas se dividen en ocho categorías: Reserva Natural, Parque Nacional, Reserva Ecológica, Elemento Natural Destacado, Reserva Florística Manejada, Refugio de Vida Silvestre, Paisaje Natural Protegido y Área Protegida de Recursos Manejados.

Astrálaga reiteró su alerta ante fenómenos como las inundaciones, salinización, el incremento de eventos extremos, la pérdida de la biodiversidad, entre otros males, y recordó que la región de América Latina y el Caribe no escapaba a esta problemática. Mencionó los daños que sufren los arrecifes de coral debido a las altas temperaturas y la acidez de los mares, la reducción de los glaciares andinos y el aumento progresivo de tormentas y huracanes, que afectan cada vez a un mayor número de personas.

Entre las propuestas de la directora del PNUMA estuvieron el Corredor Biológico Mesoamericano y el del Caribe, que fomentan la labor conjunta entre países. También pidió definir políticas racionales que prioricen y conserven el capital natural, a la par que avanza el desarrollo, y a cambiar los patrones de consumo de las naciones desarrolladas.

Al referirse al estado del tema ambiental en Cuba, la titular del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente destacó que “Cuba goza de autoridad y reconocimiento internacional en la esfera ambiental; y sus resultados han contribuido al desarrollo del país y al mejoramiento de la calidad de vida de sus ciudadanos”.