Picardía y plusvalía

En los años finales de la década de los 60 del siglo pasado proliferaban los manuales de Economía Política, sobre todo de autores de la Unión Soviética, cuyos contenidos eran temas de muchas conversaciones.

Por aquellos lejanos días, en la parada de la Ruta 91 en la Quinta Avenida de Jaimanitas, una charla con René Castellanos Ochoa, profesor de Economía Política del Capitalismo, derivó hacia la teoría de Carlos Marx. Algo así dijo: "No, Chang, no es así. Tú puedes comprar a peso aquí y venderlo a dos allá, usando las picardías que dices, pero suponiendo que todos fueran iguales de pícaros, eso no conduce al capitalismo. Es la plusvalía, cuya fuente es el plustrabajo: el proletario produce 20 pesos, el burgués le paga uno y se apropia del resto y forma el capital."

Casi medio siglo después, recuerdo aquella charla al escuchar: Lo que pasa es que la ganancia la obtienen “De-una-mano- pa' otra”, haciendo miles y miles de pesos en minutos o en pocas horas.

Así explican algunos cómo unos cuantos están acumulando dinero gracias a los productos que van de una mano para otra sin alterar sus características, ni elevar el volumen de mercancías, sino incrementando con picardías el precio desde que sale del productor hasta llegar al consumidor a través de una cadena de intermediarios estatales, privados, legales e ilegales.

Por supuesto que a la picardía para que el otro no vea o sepa algo y sacar provecho de ello, se le agrega el ingrediente de la corrupción y la falta de escrúpulos, con lo cual tuercen el rumbo de una mercancía para llevarla por los vericuetos de la especulación y de medrar a costa de las necesidades del prójimo.

Carlos Marx tuvo el mérito de desentrañar científicamente la esencia de cómo se forma y acumula el capital, algo que hasta ese momento se le atribuía a circunstancias, casualidades o características individuales de las personas.

Como dijo el antiguo profesor, solo con picardía no se construye el Capitalismo, pues el burgués requiere apoderarse de la plusvalía para amasar el capital. Y agrego hoy: No se construye el Capitalismo, pero sí pueden impedir cualquier obra.