Salud cerebral y ejercicios aeróbicos

A medida que van pasando los años y la vida transcurre hacia la tercera edad, uno de los principales problemas en muchos de quienes acumulan el tiempo a sus espaldas es la deficiencia cognitiva y una disminución en la capacidad de recordar.

La memoria, poco a poco, se va desintegrando de manera similar a una imagen cada vez más borrosa en una antigua foto.

Mantener la agudeza mental de décadas pasadas en los momentos cuando se necesita recordar el nombre de una cara amable y conocida o la dirección de un sitio agradable y visitado muchas veces, pudiera convertirse en todo un reto.

HAY SOLUCIÓN PARA CASI TODO

La salud cerebral de los adultos mayores pudiera mejorar o incluso mantenerse como en los mejores tiempos mediante la ejercitación aeróbica.

Caminar, correr, montar bicicleta o realizar muchas otras actividades aeróbicas se ha demostrado cómo mejoran la memoria y la función cerebral al incrementar la cantidad de sangre enviada al cerebro y específicamente, a determinadas zonas de ese preciado órgano.

SE DEMUESTRA UNA VEZ MÁS

Fue realizada una investigación en la Universidad de Texas cuyos resultados se publicaron en la revista Frontiers in Aging Neuroscience. Se estudiaron dos grupos de personas sedentarias entre los 57 y los 75 años de edad.

La capacidad de pensamiento y el flujo sanguíneo cerebral fueron medidos en ambos grupos. Uno de ellos realizó ejercicios sistemáticos en bicicleta estacionaria y en cinta rodante mientras el otro solo mantuvo su vida habitual.

En quienes practicaron con entusiasmo y asiduidad los ejercicios físicos durante doce semanas, se encontraron evidentes mejorías en cuanto a la memoria así como un aumento del flujo sanguíneo al hipocampo, zona cerebral diana de la enfermedad de Alzheimer.

Otra zona esencial del cerebro, la llamada “corteza cingulada” relacionada con la capacidad mental,  también recibió los beneficios del impetuoso torrente sanguíneo cerebral estimulado y acrecentado por los ejercicios.

SI ES BUENO PARA UNOS…

Ha sido demostrado cómo los ejercicios aeróbicos pueden reducir e incluso revertir o evitar, según de quien se trate, las consecuencias biológicas, no precisamente inevitables, del envejecimiento.

El ejercicio mental sumado al ejercicio físico puede ser la mejor combinación, el dúo perfecto y bien acoplado, para la salud cerebral en su conjunto.

De ahí la recomendación de la permanencia en cualquier actividad laboral, sea cual sea, a fin de mantener la ejercitación mental por tiempo indefinido.

Si además esta actividad es gratificante desde el punto de vista económico o social, pues mucho mejor.

ES BUENO PARA TODOS

La lógica o la deducción más elemental indican cómo aquello bueno para unos, también es bueno para todos.

Si la estructura básica del cerebro de las personas maduras puede alterarse beneficiosamente a través de los ejercicios físicos y de la estimulación constante del pensamiento, también pudiera suceder, y tal vez con mayor énfasis, en sujetos con menos años.

De ahí la agradable necesidad de incorporar en la vida diaria de todos nosotros actividades mentalmente desafiantes y, de manera simultánea, la práctica disciplinada de actividades físicas.

Además de ser un buen ejemplo para las generaciones más jóvenes, tal vez estemos creando una sociedad más productiva porque contaría con personas más inteligentes.