Alimentos funcionales

Las más sabias recomendaciones aconsejan mantener una dieta sana, variada y equilibrada como la mejor manera de prevenir ciertas enfermedades y garantizar una buena salud.

Los nuevos estilos de vida de la civilización actual han provocado el abandono de determinados hábitos de alimentación tradicional saludable. En la actualidad estas malas costumbres se relacionan con la aparición de un gran número de enfermedades, muchas de ellas invalidantes, graves y mortales.

Gran cantidad de personas, apegadas a la comida rápida o fast food, no ingieren todos los nutrientes necesarios al organismo humano o lo hacen en cantidades inadecuadas.

Los llamados alimentos funcionales o inteligentes son capaces de equilibrar y garantizar la ingestión de los nutrientes saludables recomendados por los especialistas en nutrición.

ALIMENTOS FUNCIONALES

Los alimentos funcionales contienen ciertos componentes capaces de ejercer sobre nuestro organismo un efecto beneficioso, más allá de su función nutritiva. Son compuestos biológicamente activos capaces de ofrecen la posibilidad de mejorar las condiciones físicas y mentales de cada persona e incrementar el bienestar general, así como disminuir el riesgo de contraer ciertas enfermedades.

SE DEBEN CONSUMIR DIARIAMENTE

Muchos alimentos habituales de nuestra dieta contienen estos componentes beneficiosos para la salud de forma natural. Entre ellos se encuentran: las frutas, hortalizas, legumbres, frutos secos y semillas alimentarias. Los cuales contienen fitoquímicos, antioxidantes, fibras y muchas vitaminas y minerales esenciales para preservar la salud.

En este tipo de alimentos también se encuentran los pescados de mar, por su contenido en ácidos grasos esenciales omega 3, muy beneficiosos para la salud cardiaca y cerebral.

Algunos alimentos funcionales son modificados por diferentes procedimientos. Las modificaciones más habituales son el aumento de un componente natural del alimento, la adición de uno saludable no integrante del alimento natural, la sustitución o la eliminación de un elemento con efectos perjudiciales para la salud, la modificación en la biodisponibilidad de algún componente del alimento para mejorar la asimilación de otro más beneficioso y/o una combinación de las posibilidades mencionadas.

ACCIONES BENEFICIOSAS

Los alimentos funcionales pueden beneficiar órganos como el corazón, el hígado o el páncreas; sistemas como el inmunitario, circulatorio o digestivo; o actuar sobre ciertas funciones fisiológicas como la memoria o el sistema inmunitario del organismo.

Aquellos con útiles efectos metabólicos pueden reducir el riesgo de diabetes, obesidad o enfermedades cardiovasculares. Entre ellos se encuentran los que poseen bajo contenido en calorías, azúcares y grasas; o galletas y jugos enriquecidos con fibra vegetal.

COMPONENTES FUNCIONALES

Entre los componentes funcionales se encuentras los probióticos como el yogur, un alimento muy nutritivo derivado de la leche, así como la fibra insoluble y la soluble presente en alimentos integrales, legumbres, semillas, cáscaras y tallos de frutas y hortalizas.

Muy importantes son los ácidos grasos poliinsaturados, como el omega 3, protector del sistema cardiovascular, presente en los pescados; así como el ácido oleico proveniente del aceite de oliva, reductor del colesterol y con actividad vasodilatadora.

En este grupo se encuentran los fitoquímicos. Son sustancias naturales presentes en los vegetales que colaboran con el metabolismo de manera favorable. Tienen acción preventiva en enfermedades crónicas, cardiovasculares y disminuyen el riesgo de algunos tipos de cánceres.

También aparecen los fitoesteroles, que actúan reduciendo la absorción del colesterol. Los fitoestrógenos, con estructura similar a los estrógenos disminuyen síntomas de la menopausia y premenstruales y muchos otros elementos más.

Finalmente, los antioxidantes, sustancias capaces de retrasar o prevenir el envejecimiento celular prematuro. Se encuentran en abundancia en frutas y vegetales.

UNA ALIMENTACIÓN MÁS SANA

Una alimentación más sana es igual a decir una alimentación más inteligente. Seleccionando los alimentos más saludables, entre ellos los funcionales, garantizará una buena salud para su cuerpo y para su mente. Aprenda a conocer lo mejor para usted y su familia.