Tambores de la paz, por Venezuela y contra el fascismo

En el II Congreso Internacional de Escritores para la Defensa de la Cultura, en la España bajo las bombas de 1937, se reunieron decenas de intelectuales de 26 países por la “patria internacional”. Todos, los que ya habían cambiado “la pluma por la pistola” y los que reclamaban luchar “con la pluma y con la palabra, como cada uno pueda mejor”, sentían que allí se dirimía el destino de la humanidad.

Por aquellos días, Ernst Busch, un actor y cantante alemán incorporado a las brigadas internacionales, añadía esta estrofa a un poema de Bertolt Brecht (1898‑1956), convertida en la “Canción de solidaridad”:

“Combatientes de la libertad de todos los países,

¡glorificad la solidaridad!

Ya que es el arma más fuerte,

a la que ningún adversario resiste”.

El internacionalista alemán era solo uno entre los tantos músicos y escritores que se sumaron a las filas republicanas contra el golpe de Estado de Franco; como alude el cortometraje Jarama, dirigido por Alberto Pla, guitarrista de la banda española Boicot.

Con una de sus escenas comienza su homónimo videoclip. En esta, uno de los 350 brigadistas irlandeses le responde a uno de sus compañeros, un español que le pregunta si se podría ver el futuro y saber si valía la pena su lucha: “¿A quién le importa? No hay que temer el futuro ni llorar por el pasado. Lo único que tenemos que hacer es ser honestos con nosotros mismos”.

Como artista honesto, consciente de que en Venezuela “tiene lugar otra patraña más del imperio” y en sus fronteras se decide mucho más que un proyecto bolivariano, el trovador cubano Raúl Torres tomó la iniciativa, con el respaldo de la multinacional TeleSur, de lanzar una campaña global y colaborativa Tambores de la Paz. Proyecto en el que pueden participar “artistas y no artistas, cualquier persona, gente que quiera sumarse a nuestro llamado por la paz en Venezuela”, “grabando un pedazo de la canción entera o el estribillo que le guste, el coro que le guste, incluso rapeando” —comentó el cantautor al portal Cubasí. “El premio es nada más y nada menos que participar en el video oficial de la campaña con la canción” —añadió.

Los videos, a enviarse a TeleSur, alimentarán varias versiones del videoclip original y se compartirán en las redes sociales y programas de la televisora. Es una canción festiva que dice muchas verdades. Escrita, al decir de Raúl Torres, para sensibilizar acerca de que “con las armas no se va a lograr nada, tan solo sangre”. “Tambores de la Paz viene a ser una especia de abrazo, de reconciliación entre los venezolanos, busca eso, piensen lo que piensen”.

En la grabación acompañaron al cantautor Yulaysi Miranda, Karel García y el rapero Alex Alday. En los coros intervinieron Fabiana Pérez, Melina Torres, Danasy Olivera y el dúo Indiana y Rodín. Mientras que en los instrumentos participaron Jorge Kendry, Lester Domínguez, Eduardo Corcho y Ana Karla Recio, junto al mismo compositor que toca la guitarra y el tambor.

Todos con la fe en que contribuirá a evitar la guerra, la destrucción y la desesperanza del pueblo venezolano. Así luchan contra el odio, como pueden, con cultura y música.

“Yo creo que esto es algo necesario para ahora mismo, que casi vemos con evidencia aires de guerra y tambores de guerra sonando muy alto. Pienso que hay que bajar esos niveles de ruido y volver a la realidad, pisar la tierra otra vez y tocar los tambores de la paz” —argumentó el trovador a Cubasí.

“Un ataque militar a Venezuela hoy significa un ataque a toda América Latina y sería una herida muy grave para América Latina. Venezuela ahora es uno de los centros neurálgicos, importantes de América y del mundo entero, de todo el orbe. Eso es sabido por el imperio y por eso es su prioridad en atacar a Venezuela”. 

“Ha hecho un daño muy grande ya y un estrés muy grande en la propia población venezolana, ya que esto no va de militar a militar, esto va del gobierno estadounidense al pueblo venezolano, los que están sufriendo verdaderamente es todo un pueblo, creo que es un momento para reflexionar, para que el mundo entero, incluidos esos que se equivocan pensando que una guerra puede solucionarlo todo, reflexionen”-añadió.

La canción, con evidentes tintes latinoamericanos, como en muchas de las creaciones de Raúl Torres, se inicia con una chacarera y deviene en una contemporánea guaracha.

Raúl Torres es autor e intérprete de títulos románticos como: “Candil de nieve”, “Se fue”, “Regrésamelo todo”,  y de otros épicos, con la misma carga de poesía, como “El regreso del amigo” (dedicado al Comandante Hugo Chávez), y sus tres temas dedicados al líder histórico de la Revolución Cubana,  “A través del sol”, dedicado en su 88 cumpleaños y estrenado precisamente por TeleSUR, su emblemática “Cabalgando con Fidel”, compuestas horas después de la de la desaparición física del Comandante en Jefe y la más reciente “Laureles y Olivos”. 

El gesto solidario de Raúl Torres lo reconoció el presidente cubano en su cuenta de Twitter (@DiazCanelB): “Otra vez el talento de un poeta como Raúl Torres, al servicio de una causa justa y noble. Que suenen sus «Tambores de la paz» hasta que cesen los de la guerra”.
 
El también trovador Mauricio Figueiral estuvo a cargo de la dirección del video clip inicial. Es un audiovisual sencillo que recoge momentos de la grabación del tema. Figueiral  es graduado de la Facultad de Medios Audiovisuales del Instituto Superior de Arte. Se sabe que él mismo lleva sus temas al formato de video clip, confecciona los plegables de los conciertos y diseña la escenografía de algunos de los escenarios en los que canta. Ha realizado más de 10 videoclips, cortometrajes de ficción, como “Subjetivismo” y “Sanitarium Tremens”, ha dirigido programas de Televisión en Caracas y desarrolla diversos proyectos de creación audiovisual, como “Sesiones vagabundas”.

Para Bertolt Brecht (1898‑1956, “La idea de que el músico no debe preocuparse en absoluto de la función de su música, se corresponde con un estado social en el cual aquellos que le hacen creer esto al músico son vendedores de mercancías y el músico es  el  productor de esta mercancía”. 

En un punto de la frontera entre Colombia y Venezuela, en los puentes “La Tiendita” y “Simón Bolívar”, tendrán lugar por estos días dos conciertos contrapuestos.  “Venezuela Aid Live” organizado como operación de marketing por un empresario inglés Richard Branson —creador de la discográfica Virgin y con peligrosas implicaciones injerencistas, donde participarán- conscientes o no- famosos “músicos vendedores de mercancía”. Un "truco", al decir del músico Roger Waters, mítico integrante de Pink Floyd.  En el otro, “Hands off Venezuela”, los que apoyan al legitimo gobierno de Nicolás Maduro, y cantarán en contra de las “pretensiones intervencionistas del gobierno de Estados Unidos y Colombia".  
      
Raúl Torres y los que lo acompañan con  "Tambores de la paz", resuenan con estos últimos.