PMA en Cuba: Construyendo alianzas (+ Infografía)

Cuba, a pesar de su condición de país subdesarrollado y bloqueado, resalta ante los organismos de Naciones Unidas por tener claramente establecida su política social; condición que le dio paso a cumplir los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), varios de ellos alcanzados tiempo antes de que fueran acordados en el 2000, y que la ubican en buena posición frente a las metas por lograr en 2030.

Así destaca el accionar y los relevantes esfuerzos de esta nación, ubicada en el Mar Caribe, para garantizar que la seguridad alimentaria se mantenga en la agenda política de la región, un asunto, que a lo interno, queda claramente definido desde los lineamientos de su política económica y social.

En reconocimiento a lo anterior, en 2015 y hasta 2018, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) decidió iniciar un primer Programa de País en Cuba con un objetivo fundamental bien definido: garantizar la seguridad alimentaria y nutricional de los grupos vulnerables en colaboración con el gobierno cubano, tanto a nivel nacional como local, para apoyar sistemas de protección social más sostenibles y específicos.

Un año de implementación, y poco más, no es tiempo apreciable para arrojar evaluaciones y consideraciones que definan nuestra labor en la isla a través del programa, reconoce Laura Melo, al frente del PMA en Cuba, en entrevista exclusiva ofrecida a Cubahora.

Sin embargo, ante un Guantánamo bastante afectado por los embates del huracán Matthew resaltan los mecanismos establecidos desde esta agencia humanitaria para dar una rápida respuesta de apoyo a la población de los municipios más afectados.

PMA VS. MATTHEW

“En principio, el Programa País que tenemos en Cuba seguirá su curso como hasta el momento. Una vez que tengamos más información sobre el nivel de impacto que ha tenido el huracán sobre el extremo oriental del país, pues tendremos que verificar si se hacen algunos reajustes al programa, pero para ello es demasiado temprano.

”Lo que sí estamos implementando, en estos momentos, es una expansión de la actividad de PMA en Cuba. Como parte de las acciones dentro del Programa de País tenemos un pre-posicionamiento de alimentos, que funciona como un mecanismo de preparación para dar una respuesta rápida ante desastres naturales. Ahora, ante los efectos de Matthew, queda aprobada la validación y la importancia de tener un mecanismo como este que nos permite actuar rápidamente ante situaciones adversas.

”Durante seis meses, a partir de octubre de 2016 y hasta abril de 2017, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) en coordinación con el gobierno cubano iniciará la entrega de alimentos para cubrir las necesidades de 180 000 personas en las zonas más afectadas por el huracán.

”En los primeros cuatro meses brindaremos asistencia alimentaria a partir de la distribución de una entrega mensual de arroz (2,3 kg), frijol (2,1 kg) y aceite (1 libra) a toda la población de los 4 municipios más impactados (Baracoa, Imías, Maisí y San Antonio del Sur). Al mismo tiempo, estaremos apoyando a la población de los grupos más vulnerables, entiéndase niños entre 6 meses y 3 años, embarazadas y adultos mayores de 65 años, de los municipios de Caimanera, Manuel Tames, Yateras y Moa, este último de la provincia de Holguín. En el caso de los municipios más afectados, no solo apoyaremos durante los primeros cuatro meses, sino que la ayuda se extenderá durante dos meses más; pero esta vez, únicamente, a los grupos más vulnerables.

‘’Estos grupos recibirán además una entrega de micronutrientes en polvo y cereal fortificado, en el caso de los niños entre 12 y 23 meses y las mujeres embarazadas, respectivamente. Las vías de entrega de esta ayuda a la población serán los canales habituales que establece el gobierno cubano. En el caso de los víveres, se tramitará por mediación de la canasta básica, mientras que los cereales y micronutrientes serán distribuidos desde los consultorios médicos de la familia.

”Es válido destacar que el gobierno cubano está haciendo una valoración muy rigurosa de daños y, como parte de la información preliminar que se maneja, se conoce que los sectores más perjudicados hasta el momento son la vivienda, la infraestructura, la agricultura y las reservas de alimentos. En este sentido, PMA tiene previsto acciones para el fortalecimiento de las capacidades logísticas, entre las cuales contempla una entrega de almacenes temporales, camiones, así como equipamiento para la cocción y utensilios de cocina”.

Según agregó la Directora del PMA en Cuba, para brindar esta ayuda se necesitan aproximadamente 4 millones de dólares, y para ello ya se cuenta con el apoyo proveniente del gobierno de Canadá, aunque queda abierto el llamado al resto de la comunidad donante.

Aclaró, además, que al mismo tiempo que se monta esta nueva operación de respuesta rápida, las actividades del Programa de País continúan, pues se tiene el compromiso con los beneficiarios, con las instituciones del gobierno, los gobiernos locales y con los donantes, quienes merecen un resultado.

SI DE HURACANES SE TRATA…

El clima está cambiando, la alimentación también es el mensaje global para el Día Mundial de la Alimentación en este 2016. En este sentido, las cuestiones relacionadas con el trabajo de PMA en Cuba para revertir los efectos del cambio climático merecieron un aparte en la conversación con Laura Melo.

“El PMA dentro de su Programa de País tiene definida un área de trabajo orientada a aumentar la resiliencia y la preparación y alerta temprana ante desastres naturales vinculados al cambio climático. En Cuba no son solamente los huracanes quienes afectan el territorio. La sequía también constituye un problema grave que enfrenta el país y que afecta muchísimo la seguridad alimentaria. De hecho, uno de los problemas que tenemos ahora tras el paso del huracán es que afectó una zona del país ya bastante impactada por la sequía desde hace más de un año.

”En este sentido, PMA está trabajando muy de cerca con el Instituto de Meteorología de Cuba y el Ministerio de Ciencia Tecnología y Medio Ambiente (CITMA) para reforzar el tema de alerta temprana y protocolos de respuesta ante la sequía, puesto que con mayor frecuencia se están dando episodios de este tipo.

”No en balde es este el tema sobre el cual se quiere llamar más la atención en el marco del Día Mundial de la Alimentación, por la relevancia que tiene y por el peligro que representa el cambio climático para la seguridad alimentaria y nutricional de las poblaciones del mundo, no solo de Cuba”.

Según datos divulgados por la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI), en mayo de 2015, en comparación con igual período de 2007, el cúmulo de precipitaciones descendió en aproximadamente 135 milímetros. Se estima que la sequía afecta actualmente el 70 por ciento del territorio nacional. Como consecuencia directa, existe un aumento de la aridez, una disminución de las precipitaciones y menos capacidad para embalsar agua.

“Con respecto al tema de la sequía, sí creo que todavía hoy nos está faltando trabajar más sobre algo que sí está muy bien establecido en situaciones de huracanes, y me refiero a los protocolos y los indicadores que se deben seguir en caso de amenazas ante una sequía y que van desde la alerta temprana hasta la toma de medidas para rebatir los efectos”.

Cuba, al ser un archipiélago en el Caribe, es un país con mucha vulnerabilidad al cambio climático y a los desastres naturales. Al respecto, la representanta de PMA en el país alertó sobre la importancia de un trabajo de preparación desde las comunidades, con los productores y las instituciones. Es decir, un tema que trasciende las esferas políticas y de gobierno, para volverse una cuestión también de las comunidades.